La Comisión de Prisiones Centrales de la Asociación de Derechos Humanos (IHD) dijo que 49 presos han perdido la vida desde principios de 2020. 

El Copresidente de la IHD, Öztürk Türkdoğan, dijo que la "Ley de Ejecución Penal", que se publicó en la Gaceta Oficial el 15 de abril de 2020, era discriminatoria, y que conducía a la liberación de los líderes de las organizaciones delictivas.

Türkdoğan añadió: "Han mantenido tras las rejas a periodistas, estudiantes, abogados y, especialmente, presos políticos aunque no hubieran cometido ningún acto violento".

La integrante del Consejo Ejecutivo Central Nuray Çevirmen y la miembro de la Comisión de Prisiones Centrales Dilan Ateş recordaron que "según nuestra declaración de marzo, por lo que pudimos detectar, había 1.564 presos enfermos en las prisiones de Turquía y 591 de ellos estaban gravemente enfermos. Este número ha aumentado".

Planteando preocupaciones sobre la higiene y las medidas preventivas para contrarrestar la propagación de Covid-19 en las prisiones, Ateş señaló: "El COVID-19 golpea especialmente a las personas con enfermedades crónicas. Desde el 15 de abril, 4 prisioneros gravemente enfermos de más de 70 años han perdido la vida".

Ateş declaró que "la gran mayoría de los prisioneros enfermos no pueden ir al hospital porque no quieren quedarse solos en los pabellones de cuarentena. Se deben tomar medidas suficientes para evitar la muerte en las prisiones, ya que son cada vez más frecuentes. Los reclusos deben tener acceso a su derecho a la atención médica y deben proporcionarse todas las condiciones compatibles con la dignidad humana para que se pueda proteger la integridad física y psicológica de las personas".