La mayoría de los habitantes de Hakkari (Colemêrg) viven de la ganadería. 300.000 personas viven en esta provincia fronteriza con Irak e Irán. Los inviernos en la región montañosa son duros y los ganaderos ya han empezado a prepararse para la estación fría.
En el pueblo de Xenanis, a diez kilómetros de la capital provincial, la gente recoge hierbas y pastos en primavera y verano. Las plantas de los pastos de alta montaña se recogen a mano con equipos tradicionales. La cosecha se lleva después al pueblo en caballos, mulas y, a veces, tractores, y se pone a secar. En otoño, la hierba seca se transforma en heno con una trituradora para alimentar a los animales en invierno.
El agricultor Renas İhtiyatoğlu, de Xenanis, afirma que los precios del heno y la paja han subido mucho durante la crisis económica en Turquía: "Para mitigar los efectos de la crisis económica, nosotros mismos recogemos la hierba y la llevamos al pueblo a caballo y en tractor. En un punto del pueblo, la cosecha se apila una encima de otra. En otoño hacemos heno con ella. Para ello, traemos al pueblo una astilladora, que todo el mundo utiliza aquí para procesar el heno. En invierno damos el heno a nuestros animales".