La Junta Electoral Suprema de Turquía (YSK) ha dictaminado que los alcaldes electos en las elecciones del 31 de marzo que durante el periodo de estado de emergencia fueron destituidos de sus cargos por decretos estatutarios, no pueden asumir el cargo.

El HDP ha acusado a la YSK de haber iniciado una política conspirativa con la mencionada decisión, que afecta a candidatos del HDP en varios distritos de Diyarbakır y de Van, y también en Edremit, Tuşba y Çaldıran, donde los candidatos del partido de Erdogan, el AKP, asumirán los cargos.

El viernes se congregó una multitud de gente ante la Junta de Distrito de Edremit, en la provincia de Van, para protestar contra la decisión de la YKS que da los cargos del HDP, el partido más votado, al partido de Erdogan.

Los manifestantes, entre quienes se encontraban los co-presidentes electos del HDP y representantes provinciales del HDP y el DTK, protestaron por la decisión de la YSK con un comunicado de prensa y una sentada.

Hablando en nombre de la multitud que secundó la sentada, la co-alcaldesa electa del HDP por Edremit, Gülcan Kaçmaz Sayyiğit, declaró que la voluntad de la gente había sido incautada una vez más tras las elecciones del 31 de marzo.

La policía atacó a los manifestantes mientras Sayyiğit aún seguía con su discurso. La co-alcaldesa electa declaró que su lucha no se limita a los municipios, y que continuará con ella en todas las áreas de la vida.