Continuaron las protestas en respuesta a la toma del municipio de Batman (Êlih) del 4 de noviembre. La policía utilizó intensamente gases lacrimógenos en los barrios donde se estaban celebrando manifestaciones. También se emplearon gases lacrimógenos en el barrio de Bağlar, a pesar de que allí no se estaban produciendo protestas.

Un niño de 5 años resultó afectado por el gas lacrimógeno lanzado al azar. La familia del niño expresó su indignación, deteniendo un vehículo blindado de la policía y protestando por el ataque. A pesar de la protesta de la familia, la policía siguió utilizando gases lacrimógenos.

El periodista de la Agencia Mezopotamya (MA) Heval Önkol también fue trasladado al hospital debido al fuerte uso de gas lacrimógeno. Se ha informado de que su estado es estable.