Las Fuerzas del Trabajo y la Democracia de Esmirna y las instituciones alevíes hicieron una declaración frente al Centro Cultural Alsancak Türkan Saylan para conmemorar a los que perdieron la vida en la masacre de Madımak el 2 de julio de 1993.
Pancartas en las que se leía "Madımak está en todas partes, en todas partes está ardiendo. No hemos olvidado, no olvidaremos" y "La luz de los que están en el torbellino en los incendios es la luz de nuestra lucha por la igualdad de ciudadanía" y "No olvidaremos a los que ardieron en Sivas o Sivas" se abrieron.
El diputado por Esmirna del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Burcu Gül Çubuk, representantes de numerosos partidos políticos e instituciones, así como numerosas personas asistieron a la declaración, en la que se gritaron consignas como "No seremos los alevíes del Estado" y "No olvidéis Sivas".
Madimak lleva ardiendo 30 años
Gülbahar Kaplan, responsable regional del Egeo de la Federación Aleví Bektashi, afirmó que Madımak lleva ardiendo 30 años y añadió que, a pesar de todo este tiempo, el Estado no se ha enfrentado al 2 de julio, al igual que no se enfrentó a otras masacres. Kaplan dijo que es deber del Estado revelar las fuerzas oscuras que se esconden tras la masacre y añadió: "Enfrentarse a la masacre significa que el Estado también se enfrenta a sí mismo. Porque la conmemoración de Pir Sultan Abdal, que se celebró por cuarta vez ese año, fue un acto conjunto celebrado con el permiso del gobernador de Sivas y el Ministerio de Cultura. Por ello, las actividades del Estado fueron atacadas y 33 ciudadanos perdieron la vida".
Llamamiento a estar en Sivas el 2 de julio
Kaplan afirmó que la masacre estaba planeada y añadió que el Estado no la impidió. Kaplan subrayó que Madımak fue un punto de inflexión en el historial de democracia negra de la República Turca.
Afirmando que la masacre de Madımak fue un crimen contra la humanidad, Kaplan dijo: "Los crímenes contra la humanidad no prescriben. Estemos en Sivas el 2 de julio para decir no a la prescripción".