La Comisión Económica y Social para Asia Occidental de las Naciones Unidas (CESPAO) ha actualizado las cifras sobre el conflicto en Siria y su reconstrucción.

En la reunión, expertos, representantes de las organizaciones de la ONU y otras partes interesadas clave discutieron los últimos indicadores macroeconómicos y los impactos del conflicto en Siria, incluido el cambio en el PIB, con una explicación sobre las fuentes de estos cambios.

Los debates se centraron en estimaciones relacionadas con el volumen de destrucción del capital físico y su distribución sectorial, que según los expertos de la CESPAO alcanzó más de 388 mil millones de dólares, mientras que el costo físico real de la destrucción fue cercano a 120 mil millones de dólares.

Estas cifras no incluyen las pérdidas humanas resultantes de muertes o la pérdida de las competencias humanas y la mano de obra calificada debido al desplazamiento, considerados los habilitadores más importantes de la economía siria.

En cuanto a los indicadores cuantitativos y cualitativos disponibles, los expertos discuten los desarrollos monetarios y bancarios y la posición financiera pública, así como otros asuntos tales como la economía de la violencia, la seguridad alimentaria y el impacto de las medidas económicas unilaterales impuestas a Siria. También se plantearon las consideraciones demográficas, la pobreza y la situación de la educación y la salud.

Según estimaciones de la ONU, hasta 400 mil personas perdieron la vida en la guerra en Siria, mientras que la mitad de la población del país de 22 millones de habitantes tuvo que abandonar sus hogares con al menos cinco millones forzados a emigrar a otros países.