El juicio del político kurdo Selahattin Demirtaş por supuestamente insultar al ex primer ministro Ahmet Davutoğlu, que se ha prolongado desde 2017, terminó hoy con un veredicto. La 14.ª Sala Penal del Tribunal Regional de Mersin condenó al ex co-presidente del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) a poco menos de un año de prisión. La fiscalía había exigido el máximo de cuatro años y ocho meses.

El trasfondo del juicio por injurias contra el político de 48 años son las críticas a la actuación del entonces gobierno de Davutoğlu en relación con los toques de queda y el asedio militar a las ciudades kurdas en el invierno de 2015/2016. En un mitin en la provincia costera de Mersin en febrero de 2016, Demirtaş había planteado la cuestión de los crímenes de guerra cometidos por el ejército turco contra la población civil kurda y vio al entonces primer ministro Davutoğlu (anteriormente AKP, ahora GP) como responsable.

Al igual que el presidente Recep Tayyip Erdoğan, Davutoğlu interpretó cada declaración en su contra y sus políticas como un insulto al jefe de gobierno y demandó a Demirtaş. El politico kurdo no estuvo presente en persona cuando se pronunció el veredicto, pero se integró en el juicio a través de un sistema de videoconferencia desde la prisión de alta seguridad de Edirne.

"El discurso del que me acusaron fue entonces, como ahora, una crítica a las violaciones sostenidas, graves y deliberadas de los deberes como primer ministro", expresó Demirtaş. Agregó que había ejercido el derecho que le otorga la constitución y respaldó sus críticas.

El asesor legal de Demirtaş se refirió a la libertad de expresión de los parlamentarios y al principio de no responsabilidad de éstos por las declaraciones hechas en el ejercicio de su cargo y exigió que se desestimara el caso. El tribunal rechazó la solicitud y condenó a Demirtaş a una pena de prisión de once meses y veinte días. La sentencia no fue suspendida porque el tribunal no vio "pronóstico positivo" para el acusado. La misma aún no es definitiva.

Selahattin Demirtaş ha estado en prisión durante más de cinco años. El entonces líder del HDP fue arrestado en noviembre de 2016 junto con otros nueve diputados del HDP, incluida la ex co-presidenta Figen Yüksekdağ. A pesar de una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), no ha sido puesto en libertad. En el juicio principal, se le acusa, entre otras cosas, de fundar y dirigir una organización terrorista, propaganda terrorista e incitación al pueblo. La acusación se basa en 31 resúmenes de procedimientos presentados al parlamento turco durante su tiempo como diputado para la eliminación de la inmunidad. Si es declarado culpable, Demirtaş enfrenta hasta 142 años de prisión. En el juicio por las protestas de octubre de 2014 contra el apoyo turco a la milicia yihadista "Estado Islámico" (EI) en el ataque a la ciudad de Kobanê, en Rojava, Demirtaş se enfrenta incluso a hasta 15.000 años de cárcel.