En una declaración publicada en sus cuentas de redes sociales, Mazlum Abdi, comandante en jefe de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), habló sobre la reunión celebrada en Aqaba, Jordania: "Vemos el resultado de la cumbre de Aqaba de ministros de Asuntos Exteriores árabes con respecto a Siria como positivo.

"Apoyamos también los esfuerzos de los países árabes por garantizar la estabilidad en Siria. Consideramos que se trata de un paso fundamental hacia un diálogo constructivo para una nueva Siria. Asimismo, subrayamos la importancia de detener todas las actividades militares en suelo sirio. La estabilidad en Siria comienza con la participación de todas las partes y el reconocimiento de la unidad del país, lo que abre el camino hacia una paz duradera".

Contexto

Los ministros de Asuntos Exteriores de Jordania, Arabia Saudí, Irak, Líbano, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Qatar emitieron el sábado una declaración conjunta tras reunirse en el puerto jordano de Aqaba, en el Mar Rojo. Los diplomáticos de los ocho países de la Liga Árabe acordaron "apoyar un proceso de transición pacífica" en Siria tras el derrocamiento del presidente Bashar al-Assad.

En un comunicado, los ministros de Asuntos Exteriores afirmaron que "todas las fuerzas políticas y sociales" deben estar representadas en el nuevo gobierno sirio y advirtieron contra "cualquier discriminación étnica, sectaria o religiosa" y pidieron "justicia e igualdad para todos los ciudadanos".

Agregaron que el proceso político en Siria debe ser apoyado por "las Naciones Unidas y la Liga Árabe, de conformidad con los principios de la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad", una resolución de 2015 que estableció una hoja de ruta para una solución negociada.