La Administración Autónoma Democrática del Norte y Este de Siria (DAANES) hizo un llamamiento a las fuerzas internacionales ante el peligro inminente que corre la presa de Tishrin, mientras aumentan los temores de su colapso debido a los continuos bombardeos turcos y los ataques de mercenarios aliados.
La Administración Autónoma afirmó: "Desde la caída del régimen de Asad el 8 de diciembre de 2024, las facciones apoyadas por Turquía han seguido atacando la presa de Tishrin y sus alrededores. Los aviones de guerra y los drones turcos han atacado las zonas que rodean la presa, lo que ha intensificado el conflicto entre el Consejo Militar de Manbij y las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) por un lado y el llamado Ejército Nacional Sirio por el otro".
El comunicado continúa: "Es evidente que estos ataques tienen como objetivo desestabilizar las áreas de la Administración Autónoma Democrática y apoyar las ambiciones de Turquía de ocupar más territorio sirio. Las facciones involucradas en estas acciones hostiles han mostrado un patrón de violencia al servicio de los objetivos de Turquía, lo que es evidente en las violaciones contra el pueblo de Manbij desde que tomaron el control de la ciudad en diciembre de 2024".
La Administración Autónoma señaló que "la violencia ejercida por las fuerzas turcas y sus facciones aliadas ha suscitado preocupación por la seguridad de la presa de Tishrin. El posible ataque a esta infraestructura vital plantea una vez más una amenaza directa a la vida de cientos de civiles en la región. Advertimos que cualquier ataque o destrucción de la presa podría tener consecuencias catastróficas, incluidas inundaciones generalizadas, pérdidas significativas de vidas, destrucción de la infraestructura y graves daños ambientales".
DAANES destacó que el colapso de la presa no sólo afectaría a la población local sino que también podría tener efectos devastadores en toda la región, incluyendo la infraestructura de servicios y la propiedad pública y privada.
“La presa de Tishrin es un recurso vital para generar energía y proporcionar agua potable. Con una longitud de 1,5 kilómetros y una capacidad de 1.900 millones de metros cúbicos de agua, desempeña un papel crucial en el sustento de los habitantes del norte y el este de Siria. Ya ha sufrido daños en los últimos años, lo que ha afectado a su capacidad operativa, y cualquier daño adicional podría dejarla inoperativa, lo que provocaría efectos a largo plazo en la estabilidad de toda la región”.
La Administración Autónoma Democrática recalcó la necesidad urgente de una intervención inmediata y de ejercer presión sobre Turquía para que “ponga fin a sus acciones agresivas y garantice la protección de los civiles y de las infraestructuras vitales”. Asimismo, pidió un alto el fuego general en el territorio sirio para lograr la paz y la estabilidad.
También destacó la importancia de los esfuerzos internacionales para abordar la crisis siria, y pidió una solución política que garantice la participación de todos los partidos sirios "independientemente de sus afiliaciones étnicas, religiosas o sectarias" en la formación de un nuevo e inclusivo gobierno sirio.
Para concluir, la Administración Autónoma Democrática del Norte y el Este de Siria expresó la esperanza de que la comunidad internacional y los actores clave en la cuestión siria reconozcan la gravedad de la situación en la región y los instó a prevenir un desastre humanitario que podría dañar millones de vidas en caso de que se derrumbe la presa de Tishrin.