El cantón del norte de Siria de Shehba se encuentra al noroeste de Aleppo, a pocos kilómetros de la región bajo el control del régimen. La zona es característicamente desértica, aunque pese a ello tiene aproximadamente 90.000 habitantes y más de 140.000 solicitantes de asilo, principalmente de Afrin. Como resultado de los ataques de las milicias respaldadas por Turquía, la infraestructura y la agricultura en la región han sido severamente dañadas, causando que el cantón sufra problemas masivos de suministros.

Mientras Turquía y sus milicias en el norte y el oeste atacan la región repetidamente, el régimen sirio mantiene la frontera cerrada o recolecta grandes sumas de dinero por el paso. El camino desde las áreas autónomas del nordeste de Siria también atraviesa el territorio bajo control del régimen sirio y, en consecuencia, es prácticamente imposible pasar por él.

Imposición de "impuestos"

Hay cinco puntos de control en la frontera entre la región de Shehba, bajo el gobierno autónomo, y la zona controlada por el régimen. En estos puestos de control, las fuerzas del régimen extorsionan con "impuestos" a la gente de Shehba y Afrin.

Ahmed Isa, del Comité de Solidaridad de Afrin, dice que el régimen está tratando de quebrantar la voluntad de la gente de esta manera. Los camiones de asistencia procedentes de las ciudades del norte y el este de Siria están sujetos a impuestos en los puntos fronterizos.

50 muertos porque las ambulancias no pudieron pasar

Las fuerzas del régimen sirio también impiden que las ambulancias en la región vayan a Alepo. En Shehba no hay atención médica adecuada. Hasta el momento, 50 personas enfermas murieron porque las ambulancias no pudieron pasar.

No reciben combustible

Isa informa que el transporte de combustible a la región también se ve obstaculizado: "El régimen sirio aún no ha proporcionado a la población un solo barril de diésel. El régimen exige tres millones de liras sirias por cada buque cisterna enviado desde el nordeste de Siria para la gente de Afrin. Esto es un gran problema para los agricultores, y como las personas no pueden recibir calefacción en invierno, enferman".

No se permiten médicos

El régimen sirio no afloja el embargo para los servicios de salud, ni siquiera a los médicos de Alepo a quienes se les niega el acceso a los centros de salud construidos por Heyva Sor a Kurd (la Media Luna Roja Kurda) en seis lugares diferentes de la región de Shehba. Además, los camiones que transportan medicamentos a la zona están obligados a pagar un "impuesto" de siete millones de liras sirias cada uno.