La gente en Ain Issa teme el regreso de los mercenarios

La ciudad de Ain Issa, en el norte de Siria, es atacada diariamente por las fuerzas de ocupación turcas y yihadistas. La gente teme el regreso de los islamistas.

Ain Issa es uno de los centros importantes de la región del norte del Éufrates sirio y ha sido atacado por el Estado turco y sus yihadistas durante mucho tiempo. La ciudad está situada en la carretera de conexión entre Hesekê y Aleppo y, por lo tanto, es de importancia estratégica. Las fuerzas de ocupación quieren ocupar la zona y llevar a cabo ataques contra zonas residenciales todos los días.

En Ain Issa y sus alrededores conviven principalmente kurdos y árabes. En la ciudad hay unas 1400 familias. Debido a los constantes ataques, la gente teme el regreso del ISIS.

Ain Issa después de 2011

Tras el inicio de los levantamientos en Siria en 2011, la 93ª Brigada, controlada por el gobierno de Damasco, sembró el miedo y el terror entre la población de Ain Issa. La seguridad interna estaba sujeta a las milicias del "Ejército Sirio Libre" (FSA), ahora llamado "Ejército Nacional Sirio" (SNA) por el Estado turco. En la atmósfera de esa época, muchas personas de Ain Issa se sentían obligadas a abandonar la ciudad. Especialmente después del bombardeo de un depósito de combustible por la Fuerza Aérea Siria el 20 de septiembre de 2012, comenzó un gran movimiento de aviones.

En septiembre de 2012 Girê Spî (Tal Abyad) fue ocupada por la FSA. La FSA pudo hacer retroceder la influencia de la 93ª Brigada en Ain Issa y la de la 17ª División del ejército sirio, pero no pudo ocupar la ciudad. En su lugar, saqueó el silo de trigo y un almacén de algodón en los alrededores de Ain Issa.

En Ain Issa siguió reinando el caos. Las milicias cerraron las escuelas y las utilizaron como bases. Cuando el ISIS apareció en Raqqa en 2013, la presencia militar de la 93ª Brigada y la 17ª División había terminado. El ISIS ocupó Ain Issa y procedió de una manera muy cruel.

Las YPG y YPJ fueron capaces de liberar Ain Issa el 23 de junio de 2016. Después de eso, la paz y la seguridad regresaron. Los fugitivos regresaron. Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) limpiaron las ruinas de la guerra y reconstruyeron la ciudad. Se restableció el abastecimiento de la población con las necesidades básicas.

La invasión turca de Girê Spî y Serêkaniyê (Ras al-Ain) comenzó el 9 de octubre de 2019. Desde entonces, los ataques a Ain Issa han continuado. Durante los ataques de artillería diarios, la población civil resulta repetidamente herida o muerta.

"Los mercenarios no deben regresar"

La población está muy preocupada de que Ain Issa sea retomado por el ISIS o por otros islamistas. Marûf Şêx Salih, un residente de la ciudad, explica: "La gente de Ain Issa ha experimentado cosas malas después del comienzo de la revolución siria. Hoy en día están siendo atacados por el estado turco y sus bandas. Rusia se presenta como garante del alto el fuego pero no hace nada para detener los ataques".

Mihemed Muslim acuerda con él: "La gente aquí vive junta en paz y tranquilidad. Nadie quiere que los mercenarios vuelvan a la ciudad."