Los ataques del Estado turco contra el Norte y el Este de Siria están adquiriendo dimensiones cada vez más violentas. Durante el reinado del Estado Islámico (ISIS), Manbij fue el centro del suministro logístico del autoproclamado califato desde Turquía. Por ello, la liberación de la ciudad no sentó bien al régimen del AKP/MHP. Desde el principio, la ciudad autónoma ha estado expuesta a los ataques del ISIS y otras células durmientes movilizadas por Turquía, y la región ha sido bombardeada con fuego de artillería por los mercenarios del llamado Ejército Nacional Sirio (ENS).
Aunque hay repetidos ataques en el centro de la ciudad, los más afectados son los pueblos. Uno de estos pueblos es Hoşeriyê, situado a unos 22 kilómetros al norte de Manbij. Los habitantes informan de constantes ataques. Ni el ejército turco ni los mercenarios del ENS distinguen entre objetivos civiles y militares. El objetivo de los ataques es intimidar y expulsar a la población. Hisên Hemed, natural del pueblo, dijo a la agencia de noticias ANHA que la población está dispuesta a defender el país con “hasta la última gota de su sangre”.
“No podemos ir a los campos a causa de los ataques”
Particularmente, la economía de la región se ha visto muy afectada por los ataques. El cultivo de los campos se ha convertido en una amenaza para la vida de los agricultores. Por un lado, están siendo constantemente bombardeados, por otro, están llenos de municiones sin explotar, lo que supone una amenaza permanente para la vida.
Mala Yusuf Semio, quien vive a un kilómetro de los territorios ocupados, dijo: “Debido a los brutales ataques de los mercenarios, no podemos cultivar nuestros campos. La mayor parte de los agricultores ha tenido que dejar de trabajar la tierra a causa de los ataques”.
Hisen al-Alawi, del Consejo Militar de Manbij, dijo que el ejército turco abre fuego contra las posiciones de los combatientes del Consejo Militar a diario. Además, los mercenarios tratan constantemente de infiltrarse en Manbij. Los aviones de combate turcos sobrevuelan la región con regularidad para apoyar a los mercenarios.