El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR) anunció que los enfrentamientos entre las fuerzas del gobierno de Damasco y las bandas de Hayat Tahrir al-Sham (HTS) han continuado desde las primeras horas de la mañana del miércoles 27 de noviembre.

Según el Observatorio de Derechos Humanos de Irán, los combates entre Hayat Tahrir Al-Sham y las facciones de la oposición, por un lado, y las fuerzas del régimen y sus milicias aliadas, por el otro, se han intensificado en las zonas rurales de Alepo e Idlib y han dejado 182 combatientes muertos hasta ahora. Entre las víctimas mortales se encuentran 102 miembros de HTS, 19 miembros de las facciones del “Ejército Nacional”, 40 miembros de las fuerzas del régimen, incluidos cuatro oficiales, seis milicianos respaldados por Irán, 15 milicianos de diferentes nacionalidades, incluido un asesor iraní.

Los combates se produjeron tras el lanzamiento de la operación “Disuasión de la Agresión” por parte del HTS.

Hoy temprano, fuentes del SOHR informaron que las facciones lograron tomar el control de la aldea de Shabour, cerca de la ciudad de Saraqib, en la zona rural oriental de Idlib, e ingresar a un barrio de la ciudad desde el lado occidental. Esto se produjo tras violentos enfrentamientos con las fuerzas del régimen y las milicias leales a ellas.

Según SOHR, las facciones también capturaron a ocho soldados del régimen en la aldea de Ajil y en los alrededores de los complejos de viviendas cercanos, durante una operación de rastrillaje.

Por otra parte, Hayat Tahrir Al-Sham y facciones que la apoyan han cortado la autopista internacional Damasco-Alepo (M5) cerca de la ciudad de Al-Zarbah, en la zona rural de Alepo. Los rebeldes también tomaron el control del punto donde se unen las autopistas M4 y M5 cerca de la ciudad de Saraqeb, bloqueando las dos autopistas, que habían sido reabiertas por las fuerzas del régimen hace unos años.

Desde principios de 2024, el Observatorio ha documentado 370 operaciones en la “zona de distensión”, incluidos ataques de fuerzas terrestres, operaciones de infiltración, disparos de francotiradores, bombardeos, enfrentamientos y ataques con drones kamikaze, que dejaron 550 combatientes y civiles muertos. Además, estas operaciones dejaron más de 150 combatientes, incluido un soldado turco, y 257 civiles, heridos, incluidos 13 mujeres y 66 niños.

Foto de portada: SOHR