Las universidades debaten sobre la sociedad del futuro en Rojava

La educación es uno de los pilares del modelo de la Administración Autónoma.

Prosigue en la Universidad de Rojava el taller titulado “Universidad Democrática y Libre”.

Zeynet Eli, Menan Cafer y Bedran Penaber, de la Universidad de Rojava, han intervenido en el taller, mientras que Abraham Seydo, a quien el gobierno del KDP le impidió entrar en Rojava, ha tenido que pronunciar su discurso a través de Sykpe.

En el taller se han llevado a cabo debates sobre materiales y sistemas educativos para universidades, academias y escuelas.

Los docentes han mantenido un animado debate enfatizando que es muy importante abrir academias en Rojava a pesar de las difíciles condiciones que allí enfrenta el sistema educativo y la falta de docentes debidamente capacitados.

El sistema de exámenes es el mayor problema a superar en este sistema: “Estamos tratando de insertar debates y una cultura práctica. Estamos tratando de eliminar los exámenes de principio y mitad del curso”, señalaron los maestros.

Sin lugar a dudas, las universidades en el norte de Siria están poniendo en práctica un sistema que no se encuentra en el resto de universidades.

“El régimen sirio solía entrenar a los estudiantes con un sistema basado en la memorización. Como resultado, no se lograron grandes avances una vez que los estudiantes ingresaron en la sociedad. La visión social también fue limitada.

Superar esta situación es crucial para garantizar que todas las personas puedan participar en el sistema educativo y para que la comunidad se desarrolle más”.

Los profesores señalaron que el régimen sirio promovió una relación alumno-maestro basada en el miedo, y apuntaron: “Necesitamos superar esta relación. En su lugar, se debe desarrollar una relación amistosa basada en el respeto mutuo”.

Los docentes dijeron que se necesita un sistema de educación ético que garantice el desarrollo y el crecimiento de una sociedad intelectual.

También subrayaron la necesidad de incluir la filosofía elaborada por el líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, como parte del plan de estudios para los estudiantes.