La huelga de hambre continúa en la prisión número 5 de Silivri, donde los presos se unieron a la acción iniciada por la copresidenta del DTK y diputada del HDP, Leyla Güven que exige el fin del régimen de aislamiento ejecutado contra el líder popular kurdo Abdullah Öcalan.

Erdoğan Zamur, quien fue puesto en libertad el 11 de marzo de 2019, llamó la atención sobre el hecho de que en la prisión de Silivri Nº 5 había unos 158 presos políticos en huelga de hambre.

Zamur, quien estuvo en la prisión de Silivri durante 1 año, dijo: "Hasta 40 prisioneros permanecen en una celda de 14 personas y duermen en el piso".

Zamur, quien ha estado en huelga de hambre con los otros presos políticos desde el 1 de marzo y continúa en ayunas después de su liberación, confirmó que los presos están en ayunas en condiciones higiénicas muy deficientes.

Erdoğan Zamur también agregó: “Los que están en huelga de hambre reciben 2 limones, 2 litros de agua y un puñado de sal y azúcar por persona por día, que no es suficiente para satisfacer sus necesidades. En realidad es como una invitación a la muerte.

Los grupos en la resistencia están siendo presionados por la administración de la prisión, que amenazó a los prisioneros a que intervengan médicamente si su salud empeora. Después de estas amenazas, nuestros amigos han escrito al Ministro de Justicia recordando que Turquía debe respetar las convenciones internacionales que ha firmado y que rechazan cualquier tipo de intervención, incluso si pierden el conocimiento. Además de esto, se están cometiendo otros abusos, como por ejemplo el hecho de que el periódico Yeni Yaşam (Nueva vida) no se entrega a las salas”.

“Los presos en huelga de hambre están muy decididos”

Zamur, que estaba en la misma sala que los huelguistas de hambre Yusuf Bayram y Hamza Doğrul, dijo que todos los presos en huelga tienen alto el espíritu y lucharán hasta que se ponga fin al aislamiento. Zamur transmitió un mensaje de Hamza Doğrul: "Hamza quiere que todos sepan que no importa el precio de esta acción, resistirá hasta que se levante el aislamiento".

Zamur subrayó que la demanda por la abolición del aislamiento es una demanda humanitaria y debe ser reclamada por todos. “Piensa en un país que viola sus leyes en una sola prisión, se aplica una regla diferente".

Esto, dijo Namur que no debe ser aceptado por la comunidad: "La demanda básica de Leyla Güven y los otros prisioneros es que el estado implemente su propia ley".

"El gobierno prefiere el caos"

El preso político Zamur continuó: “Si hay ley en este país, entonces debería aplicarse a todos. En el proceso de conversaciones para una resolución, todos expresaron un suspiro de alivio cuando se estaban llevando a cabo conversaciones con el Sr. Öcalan en İmralı. Ese proceso mostró que había una posible solución democrática al problema kurdo. Pero después del Protocolo de Dolmabahçe, el gobierno, que pensó que este proceso no tenía ningún beneficio para sí mismo, dio un giro hacia el nacionalismo. Tienen el mismo acercamiento a la huelga de hambre. Si sucede que levantan el aislamiento, saben que no habrá ningún beneficio para ellos ya que el país se normalizaría. Así, la coalición AKP-MHP prefiere mantener al país en un caos".

Zamur terminó sus comentarios expresando: “Cuando se levante el aislamiento en Imrali, no solo los kurdos se beneficiarán de él, sino todos los pueblos de Turquía. Es por eso que todos deben jugar su papel para derrotar el aislamiento".