Mientras que el cementerio de Asri en el distrito de Cizre de Şırnak fue atacado por desconocidos, las familias de las y los mártires kurdos declararon: "Que destruyan nuestras tumbas, las volveremos a construir".
Las tumbas de seis guerrilleros/as de las Fuerzas de Defensa del Pueblo (HPG) y las Tropas de Mujeres Libres (YJA-STAR), que cayeron como mártires en la batalla, y las víctimas de los ataques genocidas de Turquía en Kurdistán del Norte en 2015, fueron atacadas por desconocidos. Las familias visitaron ayer el cementerio, ubicado en el distrito de Cizre de Şırnak, para descubrir la devastación de las mismas. Informaron que las lápidas estaban rotas y se excavó el suelo.
Hamşi Çağlı, madre de Osman Çağlı, quien fue asesinado en Cizre en 2015, informó: “Visitamos el cementerio ayer para ver que sus lápidas estaban rotas. ¿Cómo se puede molestar a los muertos? Mataron a nuestros hijos y ahora están rompiendo sus lápidas. Esto es un insulto para nosotros".
Şemsiye Levent, madre de Mehmet Emin Levent, quien también fue asesinado en Cizre y cuya tumba fue devastada, agregó: “Estas personas no pueden ser musulmanas. No quedan derechos ni leyes. Las tumbas de nuestros niños son atacadas como si matarlos no fuera suficiente. Que devasten nuestras tumbas, las volveremos a construir”.
