El informe publicado por la Iniciativa Kurda contra la Invasión Turca en Kurdistán del Sur, titulado "Evitar una nueva guerra en Kurdistán del Sur", expone las "mentiras, desinformación y planes sucios del KDP" que están "poniendo en peligro la estabilidad y la seguridad en el Kurdistán".

El informe expone que las mentiras difundidas por el KDP forman parte de una campaña de desprestigio contra el PKK. El informe describe cómo esta campaña del KDP tiene dos objetivos: "Construir las bases para una guerra interna kurda y crear una justificación para los ataques planeados; proporcionar una base para la ocupación del Kurdistán del Sur tal como han planeado los turcos durante años".

La Iniciativa Kurda contra una invasión turca en el Kurdistán del Sur dijo: "Creemos que ambos objetivos harán un gran daño en primer lugar al propio KDP, pero también al pueblo kurdo y a sus amigos. El KDP no puede encontrar ningún apoyo a estas políticas por parte del pueblo del Kurdistán del Sur y del pueblo kurdo en su conjunto. De hecho, la PUK, un aliado del gobierno del KDP, también ha declarado públicamente que no tenía ninguna información y no estaba de acuerdo con las afirmaciones del KDP realizadas anteriormente. El KDP había acusado sin fundamento al PKK de planificar ataques contra representantes de Estados y gobiernos extranjeros en Kurdistán del Sur. La KCK también ha rechazado las mentiras del KDP y ha declarado que esas mentiras y escenarios intencionales sirvieron para ocultar los crímenes del KDP y para sentar las bases de una nueva guerra".

El informe también subraya cómo "el pueblo del Kurdistán rechaza claramente los preparativos de guerra del KDP. Ha llamado al KDP a detener su colaboración con el estado turco y a tomar las medidas necesarias contra la ocupación turca de Kurdistán del Sur".

La Iniciativa Kurda contra una Invasión Turca en el Kurdistán del Sur pide a todos "que no crean las mentiras y difamaciones del KDP y que usen su influencia para presionar al KDP" y "les pide que tomen una postura clara contra los planes del KDP que ponen en peligro la estabilidad y la seguridad en el Kurdistán".

Antecedentes

Desde la liberación del Kurdistán del Sur del gobierno de Saddam en 1991, el KDP (Partido Democrático del Kurdistán) ha hecho todo lo posible por frenar las libertades del pueblo kurdo y por abusar de la causa kurda para sus propios intereses familiares y tribales. Instigó una guerra civil de 6 años de duración con la PUK, el PKK y otras facciones que duró hasta 1998.

Después de 2003, ha monopolizado el poder que tiene en sus manos y lo ha utilizado para tomar el control de todas las esferas de la vida económica, política y social. Esto ha llevado a una corrupción generalizada, favoritismo, pobreza, fuga de cerebros e inmigración,

Los periodistas y figuras de la oposición que se atrevieron a discutir estos temas en público fueron intimidados, secuestrados, encarcelados y asesinados.

El parlamento regional que quería hacer algunas reformas en el sistema político fue suspendido, prohibiéndose a su presidente incluso la entrada a Erbil. Esto ha agravado aún más la situación para el pueblo. La gente no recibe salarios, mientras que el KDP exporta más de medio millón de barriles de petróleo a Turquía y ha monopolizado las ganancias económicas en las aduanas. El dinero obtenido de la venta de petróleo se transfiere ilegalmente a bancos extranjeros y se utiliza para comprar propiedades para los miembros de la familia Barzani en el extranjero. Las personas que no pueden llegar a fin de mes y no pueden hablar han salido de vez en cuando a la calle para reclamar sus derechos (en Duhok, Zakho y Sheladize), cada vez para ser reprimidos en gran medida por las fuerzas pro-KDP y ser llevados a la cárcel en gran número.

El 1 de noviembre de 2020, las familias de las personas encarceladas pidieron a las organizaciones de derechos humanos y a las ONG que apoyaran su caso y ayudaran a poner fin a las presiones del KDP. De acuerdo con el llamado, desde el 13 de agosto de 2020 hasta ahora, 280 personas han sido arrestadas por las fuerzas del KDP.

El KDP considera que la presencia militar y de inteligencia turca en el Kurdistán es un seguro para preservar su cleptocracia sobre el pueblo. Durante 13 años, el ejército y la inteligencia turcos han estado acechando en las montañas, pueblos y ciudades del Kurdistán y hemos sido testigos de ataques aéreos diarios en tierras kurdas.

Estos ataques, realizados con el pretexto de luchar contra el PKK sólo han aumentado la difícil situación del pueblo.

Ahora el pueblo del Kurdistán del Sur está harto de toda la corrupción, la pobreza, el favoritismo, y especialmente la cooperación del KDP con el archienemigo del pueblo kurdo: Erdogan.