KCK niega los informes sobre el supuesto arresto de miembros del PKK

La KCK ha negado los informes de los medios de comunicación del KDP de que se haya detenido a varios miembros del PKK que supuestamente habían planeado ataques, diciendo que esas acusaciones suelen hacerse para legitimar futuros ataques.

El Comité de Asuntos Exteriores de la Unión de Comunidades del Kurdistán (KCK) ha negado las informaciones aparecidas en los medios de comunicación del KDP en el sentido de que la detención de varios miembros del PKK ha puesto fin a los "planes de ataque". En una declaración emitida el lunes, la KCK declaró que el partido gobernante del Kurdistán del Sur, el KDP, suele recurrir a la difusión de alegaciones de hechos falsos para legitimar futuros ataques del Estado turco contra el movimiento de liberación kurdo. La seguridad del KDP no ha detenido a ningún miembro del Partido de los Trabajadores del Kurdistán, se subraya en la declaración.

Más recientemente, tras el asesinato de Gazi Salih Alihan, director de Asayish (seguridad pública) en la oficina de aduanas del paso fronterizo de Serzêrê el 8 de octubre, la prensa y las fuerzas de seguridad del Partido Barzani acusaron a los guerrilleros de ser responsables del incidente. Las Fuerzas de Defensa Populares (HPG) condenaron claramente el ataque y negaron cualquier implicación.

"El público kurdo no ha olvidado quién defendió al pueblo y las regiones de Bashur (Kurdistán del Sur) y quién huyó cuando los esbirros del ISIS invadieron el Kurdistán del Sur", decía la declaración en referencia a la huida de los Peshmerga del KDP sin lucha desde Shengal (Sinjar) en la mañana del genocidio de los Yazidis el 3 de agosto de 2014.

"Para nuestro movimiento que lidera la lucha de liberación del pueblo kurdo, es un deber nacional y moral defender, proteger y garantizar la seguridad de nuestro pueblo. Cientos de nuestros compañeros han caído en defensa del pueblo de Bashur desde Shengal hasta Hewlêr. Nuestros comandantes inmortales Zeki Şengali, Egîd Civyan y Tekoşer Gever también están entre los que han caído en esta lucha."

La KCK señala que el movimiento kurdo considera la estabilidad del Kurdistán del Sur como una tarea central y en ningún momento ha puesto en peligro la seguridad de la región autónoma o de la población, lo que se demuestra por el hecho de que numerosos combatientes han caído como mártires por esta causa.

"El Estado turco y el KDP son los únicos responsables de la inestable situación de la región. Debido a los planes conjuntos de ambas fuerzas, las bombas y la artillería se lanzan casi a diario sobre las montañas del Kurdistán. Al igual que el régimen de Erdoğan, el KDP también trata de presionar y disuadir a los periodistas, maestros, activistas y todos los demás miembros de la oposición mediante secuestros, detenciones y represión. De esta manera, pone en peligro la seguridad de los ciudadanos".