La gente de Shengal volvió a salir a la calle el domingo para protestar por el acuerdo firmado entre Bagdad y Hewler. Los manifestantes se concentraron frente al edificio de la Administración Autónoma de Shengal y desde allí marcharon con pancartas en las que podía leerse “Rechazamos el acuerdo de Shengal”, “Viva la resistencia de Shengal” y “Viva las fuerzas de orden público de Shengal”.

La gente protestó por el juego sucio de Irak contra Shengal. Tras la marcha, Hisên Hecî, de la Administración Autónoma de Shengal, pronunció un discurso en nombre de todo el pueblo de Shengal.

Hecî señaló que el gobierno iraquí no había hecho nada por Shengal, y continuó: “Lo que decimos es que el problema de Shengal es un problema de Irak y la solución no debe buscarse fuera. Se deben encontrar soluciones permanentes para Shengal con el fin de abordar los problemas políticos, sociales y de seguridad”.

Hisên Hecî recordó que las fuerzas de orden público y la Administración Autónoma de Shengal protegieron al pueblo durante la época en que no había otro poder. “Es por eso que esta administración debe ser reconocida. Las Êzidxanê Asayishi (fuerzas de orden público) han protegido al pueblo de Shengal de todos los ataques y la violencia hasta ahora. Por eso las Êzidxanê Asayishi deberían ser reconocida como una fuerza de seguridad oficial con regulación legal”.

Hecî aseguró que continuarán organizando manifestaciones con el fin de obtener el reconocimiento oficial de la Administración Autónoma de Shengal y las Êzidxanê Asayishi. Después de la marcha, entregaron las demandas del pueblo de Shengal en el cuartel general de la policía iraquí. Los funcionarios iraquíes declararon que transmitirían estas demandas a las autoridades pertinentes.

Tras el acuerdo sobre Shengal, firmado por el Gobierno central iraquí y el Gobierno Regional del Kurdistán en Bashur el 9 de octubre de 2020, los ojos se pusieron una vez más sobre la comunidad yazidí que vive allí. La Asamblea Democrática Autónoma de Shengal (MXDŞ) dijo en su declaración que Shengal se enfrenta a un gran peligro y pidió a los kurdos y a la opinión pública mundial que fueran sensibles a esta cuestión.

Tras el acuerdo con la administración del Kurdistán del Sur, el martes pasado Irak envió las primeras unidades militares del ejército iraquí a Shengal. Alrededor de 2.500 soldados fueron desplegados en la montaña Kolik y las regiones fronterizas de los pueblos de Mediban y Sibe Şêx Xidir. Los oficiales militares iraquíes han declarado que estas fuerzas controlarán el área que llega hasta la ciudad de Rebia, y de esta manera, toda la frontera entre el Norte y el Este de Siria y Shengal.