La historia del guerrillero Xabur
Xabur sólo tenía 20 años. Era exactamente un joven y guerrillero del Kurdistán. Luchó así. Solía decir: "Quitemos la mano del ocupante de encima de la nuestra".
Xabur sólo tenía 20 años. Era exactamente un joven y guerrillero del Kurdistán. Luchó así. Solía decir: "Quitemos la mano del ocupante de encima de la nuestra".
Escribo sin pensar en cuánto puedo contar con tus bromas, agilidad, intrepidez, delicadeza y ternura. No quiero impedir que mis dedos escriban sobre ti. Vi cómo caminabas sobre las duras rocas de Xantur. Vi que caminabas suavemente sin tropezar, golpear o caer. Tu lengua giraba al sentir tu corazón. Eres el guerrillero que logra sonreír incluso en los momentos más difíciles, el guerrillero que escupe al miedo riendo hasta en el momento más aterrador. El guerrillero que da continuidad sin detener el flujo.
Cuando luchaba contra los invasores en Xantur, el valiente guerrillero dijo: "¡No puedes ser un luchador, ni siquiera puedes ser un soldado! Lo intentas en vano; no puedes vencer a los combatientes de la montaña, ¡vuelve a tu país de hormigón!". El guerrillero que dedicó su hermosa juventud a su pueblo, a pesar de su corta edad.
Xabur Intikam nació en Kobanê. Su padre, un herrero. Xabur se embarcó en el viaje para recrear el significado de este universo. En 2014, acompañó la escritura de otra epopeya y llevó a cabo el trabajo de los sucesores del mártir Ali Çiçek, el representante del joven espíritu que enseñó la resistencia después de Kobanê. Cuando llegó el momento de dirigirse a las montañas, no dudó en poner en su alforja las palabras "este camino no tiene retorno" y se puso en marcha.
En 2018 y a la edad de 18 años, se abrió camino hacia la causa de la libertad. Conoció la belleza de Heftanin, su primera tarea, y creció en las montañas con esa belleza. Le dio a Heftanin su propia belleza, Heftanin le donó su propia belleza. Vino a Xantur, que será su albergue en la Epopeya de la Resistencia Heftanin.
El guerrillero Xabur tenía una buena voz. Siempre dijo que era su único talento. Al guerrillero Xabur le encantaba hablar, reír y luchar. Decía que cada vez que subía a la cima de Xantur, rompía las fronteras. Contaba las colinas una por una y describía sus ubicaciones.
Era exactamente un joven del Kurdistán y un guerrillero del Kurdistán. Luchó así. Creía que no sólo se robaba la tierra, sino también el agua.
Por eso decía: "Quitémosle la mano al ocupante de encima de la nuestra".
Alcanzó la inmortalidad con Viyan y Goran el 3 de julio de 2020...