La migración desde el sur de Kurdistán ha aumentado

En los últimos doce meses, casi 74.000 personas han abandonado la región del Kurdistán.

Tras el referéndum de “independencia” del 25 de septiembre de 2017 en la región de Bashur (sur del Kurdistán), las crisis políticas, económicas y sociales en la zona se han profundizado.

Los problemas crecientes en la región han dado, inevitablemente, paso a la reacción de la gente: una nueva ola de migración ha comenzado.

En los once meses posteriores al referéndum, la gente de la región organizó numerosas manifestaciones y acciones para tratar de encontrar una solución a sus problemas. Las demandas fueron llevadas ante las instituciones.

Sin embargo, las condiciones de vida en la región no han mejorado y en algunos casos han empeorado. Al final, la gente empezó a abandonar sus casas para emigrar en busca de un futuro mejor.

Los migrantes, que en última instancia optan por rutas peligrosas para dejar atrás sus malas condiciones de vida, a menudo terminan en lo que se convierten en caminos de la muerte.

La gran mayoría de ellos intenta llegar a Europa a través de Turquía. Y la “crisis de refugiados” entre Turquía y Europa ha empujado a muchos a elegir rutas ilegales.

Muchos de ellos pierden la vida tratando de llegar a Europa o son atrapados y entregados a sus países de origen.

La migración aumentó después del Referéndum

Según la información obtenida por RojNews de Arî Jalal, representante de la filial de la Federación de Migración e Inmigración de la Región del Kurdistán, unas 73.689 personas emigraron de la región del Kurdistán de agosto de 2017 a junio de 2018.

Según las fuentes, en agosto de 2017, mientras se llevaban a cabo los debates del referéndum en la región del Kurdistán, la situación se tornó confusa y se reanudó una nueva ola de emigración.

Después del referéndum sobre la independencia del 25 de septiembre de 2017, la emigración comenzó a aumentar. A finales de 2017, el número de personas que abandonaron sus casas llegó a 49.979.

Solo en los primeros seis meses de 2018, unas 23.710 personas han abandonado la región.

Según la información de la Federación de Inmigración y Migración, 10.000 personas procedentes de la región del Kurdistán se alojan en los campos de refugiados de Atenas y Tesalónica en Grecia.

Se desconoce el número de personas que han perdido la vida en los últimos 11 meses, pero según las cifras oficiales, 278 emigrados desde Irak y la región del Kurdistán en los últimos 7 años han perdido la vida.

De ellos, solo 145 cuerpos han sido recuperados, mientras que el destino de los otros 133 es desconocido.

Además, 9 murieron por la exposición a abusos psicológicos y racistas.

Según la Federación, muchos inmigrantes detenidos en Turquía están recluidos en cárceles en Izmir, Canakkale y Bodrum.

Se desconoce el número exacto de inmigrantes encarcelados.

Los inmigrantes arrestados son entregados a Irak y Kurdistán.

Arî Jalal ha dicho que hasta el momento alrededor de 200 inmigrantes iraquíes y kurdos han sido enviados de regreso a Irak a través de la puerta fronteriza de Ibrahim Khalil.

Solo en octubre de 2017, 270 inmigrantes fueron devueltos a Iraq y Kurdistán.