Tras los últimos informes sobre la intensificación del uso de armas químicas por parte del ejército turco en el Kurdistán, las organizaciones kurdas piden una acción internacional para detener los crímenes de guerra en curso. La oficina de mujeres Cenî (Oficina de Mujeres Kurdas por la Paz), con sede en Berlín, también ha emitido una declaración sobre el uso de armas químicas y otras armas prohibidas contra la guerrilla kurda. Cenî llama a no seguir ignorando los crímenes cometidos contra el pueblo kurdo: "En esta guerra contra el pueblo kurdo se están pisoteando los valores humanos y hay que ponerle fin".
"La operación militar turca en Irak viola el derecho internacional"
Desde el 23 de abril de 2021, recuerda el Cenî, el Estado turco lleva a cabo una ofensiva militar contra la guerrilla kurda y la población civil en el norte de Irak. Esta operación militar en el vecino Irak es ilegal según el derecho internacional. El régimen fascista, dirigido por el AKP-MHP, comete crímenes de guerra, utiliza bombas y armas químicas prohibidas internacionalmente y lleva a cabo el terror de Estado contra el pueblo kurdo, contra todas las fuerzas que luchan por la libertad, contra personas inocentes, la población civil.
Comparable a la masacre de Dersim
Esta operación es comparable a la masacre de Dersim en 1938, dice Cenî añadiendo que "según la Oficina de Prensa de las Fuerzas de Defensa del Pueblo (HPG), el ejército turco utilizó bombas prohibidas y armas químicas 2.467 veces durante los seis meses de guerra entre el 14 de abril y el 14 de octubre de 2022. Con estos bárbaros crímenes de guerra, 27 guerrilleros de la libertad fueron cruelmente asesinados. Hoy se han dado a conocer las identidades de otros 17 guerrilleros de la libertad. Además de los gases químicos de diversa toxicidad, se ha demostrado que el ejército turco utiliza varios tipos de bombas prohibidas. El ejército turco utiliza mucho las bombas nucleares tácticas, que destruyen el sistema de túneles y provocan el envenenamiento de esta zona. También se utilizan bombas termobáricas y bombas de fósforo con propiedades similares".
Crímenes de guerra con apoyo de la OTAN
El Cenî afirma que "el uso de armas por parte del Estado turco viola el derecho internacional y las prácticas inhumanas se clasifican como crímenes de guerra. Lamentablemente, hasta ahora las instituciones internacionales competentes han hecho la vista gorda y probablemente sigan haciéndolo. El Estado turco, con el apoyo de la OTAN, está cometiendo crímenes inhumanos contra las fuerzas guerrilleras que están ejerciendo el derecho a la autodefensa en el marco de los derechos legítimos, humanitarios y democráticos del pueblo kurdo".