En el transcurso de los pasados días, dos ciudadanos kurdos han sido detenidos en la provincia de Sanandaj y llevados a una localización desconocida, y otros tres ciudadanos de la provincia de Urmia, quienes también fueron previamente detenidos, siguen todavía en la Oficina de la Inteligencia.
Según la Red Kurda de Derechos Humanos, el sábado 22 de diciembre dos ciudadanos llamados Peyman Mohammadi, residente de la población de Alak, en la ciudad de Kamyaran, y Shirko Jamshidi de Sarhoya, en Javroud, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad iraníes y trasladados a una localización desconocida.
También dos hermanos de Piranshahr, Seyyed Mosleh Taheri y Seyyed Loghman Taheri, quienes fueron arrestados por los Cuerpos de Inteligencia de la Guardia Revolucionaria Islámica en Piranshahr a principios de diciembre, siguen detenidos.
Según otro informe de Oshnavieh, un ciudadano llamado Salam Mardan, de 27 años y residente de la población de Sojja en Oshnavieh, que fue detenido por las fuerzas de seguridad del régimen el 30 de octubre, ha sido trasladado al Centro de Detención de la Intelicia en Urmia. Su familia pudo reunirse con él allí el pasado 24 de diciembre durante unos pocos minutos.
Vale la pena mencionar que estas detenciones masivas de ciudadanos kurdos se han estado llevando a cabo desde principios de este año, y que según una investigación de la Red Kurda de Derechos Humanos más de 15 ciudadanos kurdos están siendo actualmente interrogados en la Oficina de la Inteligencia Central y de los Cuerpos de Inteligencia de la Guardia Revolucionaria Islámica en las ciudades de Sanandaj y Urmia.