Tras el referéndum de independencia celebrado en la Región Federal del Kurdistán el año pasado, Kirkuk fue rodeado por las fuerzas iraquíes el 16 de octubre. Con el asedio, las fuerzas iraquíes comenzaron a cambiar la estructura demográfica.

Después de que Rakan Juburi fuera nombrado gobernador interino de Kirkuk el 17 de octubre, comenzó una nueva campaña de opresión contra las aldeas Kakai. Los residentes árabes asentados en la región llevaron a cabo una redada armada en el pueblo Ferik en Daquq el 25 de diciembre, después de lo cual se pidió a los kakais que abandonaran sus hogares en un plazo de 4 días.

Un agricultor de la aldea Ferik que desea permanecer en el anonimato dijo: "Visitamos a las fuerzas de seguridad iraquíes y les dijimos que estábamos amenazados con armas de fuego. No hicieron nada".

El agricultor dijo que las fuerzas de seguridad iraquíes les dijeron que no intervienen en tales asuntos y les dijeron que "resolvieran el problema ellos mismos".

30 familias han tenido que mudarse debido a las amenazas contra las aldeas Kakai en la región en los últimos 2 meses.

La miembro de la Asamblea Provincial de Salahaddin, Mela Hasan Germiyani, dijo: "Los árabes que venían de fuera atacaron la aldea".

Germiyan agregó: "Los árabes traídos de afuera han viajado por toda la región con el apoyo de las fuerzas de seguridad iraquíes", pero no ofrecieron ninguna solución al problema.

Las aldeas de Avaye Dara y Ali Mansur en el área de Heftexar, conformadas por 4 aldeas en la región de Daquq, así como las aldeas de Abdulaxanim, Kobani y Ebunejim en la región de Talabani, fueron allanadas y se pidió a los residentes que se fueran.

Se dice que la causa de la presión contra los kurdos en las cercanías de Kirkuk y en todos los territorios en disputa en general se debe a la falta de un gobernador hasta la fecha.

También se indicó que la razón por la que el gobernador no ha sido elegido es que no se ha celebrado una reunión con todos los miembros del Concejo Municipal de Kirkuk.

Los representantes del KDP no han asistido a ninguna de las reuniones del Concejo Municipal de Kirkuk a partir de octubre de 2017, lo que representa el mayor obstáculo para la elección de un nuevo gobernador. El KDP no asiste a estas reuniones porque quieren que se les entregue la gobernación de Kirkuk.

El PUK afirma que Kirkuk es su territorio y que tienen derecho a la gobernación según un acuerdo previo con el KDP. Los residentes de la región ven este desacuerdo entre el KDP y el PUK y la no elección del gobernador, como la razón fundamental de las amenazas contra los kakais y todos los kurdos.