Un tribunal de Hewler había dictaminado que algunos de los presos de Behdinan debían ser liberados el primer día de las Jornadas del Sacrificio.

Sin embargo, la liberación se pospuso sin ninguna justificación. Alrededor de 60 presos de Behdinan iniciaron el 22 de julio una huelga de hambre y un ayuno de muerte contra esta ilegalidad.

Al principio, cinco presos -Yusif Şerif, Mehmud Naci, Kovan Tarıq Cubrail, Emced Yusif y Nechirvan Haci- hicieron ayuno de muerte. Más tarde, se les unieron otros 55 presos.

Según Rojnews, el estado de salud de algunos de los presos en huelga de hambre se deterioró rápidamente, aunque ninguno se encuentra en peligro de muerte por ahora.

Se informó que en la noche del 30 de julio, Nechirvan Bedie, de Sheladize, vomitó sangre.