Esta semana continuará en Amed el proceso contra los periodistas kurdos Dicle Müftüoğlu y Abdurrahman Gök. Ambos están acusados de «terrorismo» por sus actividades periodísticas, y si son condenados, se enfrentan a largas penas de cárcel. La asociación de periodistas Dicle Firat (DFG) hace un llamamiento a la solidaridad. «No son nuestros colegas los que están siendo juzgados, sino los medios de comunicación libres», ha declarado la organización, con sede en Amed.

Dicle Müftüoğlu y Abdurrahman Gök, como muchos de sus colegas de la Agencia de Noticias Mezopotamya (MA) y sus predecesores prohibidos, son el foco constante de la represión. Ambos periodistas llevan años perseguidos por la justicia turca, y ya han cumplido condena en la cárcel. La acusación era siempre la misma: pertenencia a una organización ilegal. Así ha ocurrido también en el último juicio.

La acusación contra Gök, corresponsal de MA en Oriente Medio, fue redactada por la Fiscalía General de Diyarbakır siguiendo instrucciones del Ministerio del Interior turco. La acusación contra Gök, de 44 años, se basa esencialmente en las afirmaciones de Ümit Akbıyık -un antiguo activista del HDP que, para beneficiarse de la ley turca de arrepentimiento, actúa como testigo clave de la llamada policía antiterrorista y ya ha comparecido en varios juicios contra miembros de la oposición-, quien asegura que Gök trabaja «siguiendo instrucciones del comité de prensa del PKK/KCK».

Otras pruebas contra Gök incluyen reseñas de libros, como «Devran» y «Leylan», del encarcelado ex presidente del HDP Selahattin Demirtaş, artículos sobre víctimas de las leyes antiterroristas turcas y un vídeo documental sobre la lucha contra el ISIS en Kobanê. El juicio está pendiente desde 2023, y Gök pasó unos seis meses detenido el año pasado. El fiscal pide contra él hasta 20 años de cárcel. El juicio se reanudará mañana martes.

Dicle Müftüoğlu, que trabaja como redactor para MA y es también copresidente de DFG, podría ser condenado a hasta 15 años de cárcel si es declarado culpable. Müleftüoğlu, de 40 años, fue detenida en Ankara el 3 de mayo del año pasado, Día Internacional de la Libertad de Prensa, acusada de fundar y dirigir una organización terrorista y de presunta pertenencia a ella, tras permanecer varios días bajo custodia policial a instancias de la fiscalía de Diyarbakır. Después permaneció en prisión preventiva durante casi diez meses en la cárcel de mujeres de Sincan, cerca de Ankara. Como en el caso de su colega Gök, la fiscalía basa sus acusaciones contra Müftüoğlu principalmente en declaraciones de testigos de cargo que también fueron utilizados en otros juicios contra periodistas kurdos y en el juicio político de exhibición contra el HDP conocido como juicio Kobanê.

El juicio contra Müftüoğlu se reanuda el jueves 24 de octubre de 24.

DFG: Cruzada contra la prensa kurda

La DFG ha declarado que las acusaciones contra Dicle Müftüoğlu y Abdurrahman Gök están relacionadas con su trabajo en favor de la prensa kurda libre. Aunque todos los trabajadores de los medios de comunicación independientes de Turquía están en el punto de mira de un poder judicial politizado para silenciarlos, «la espada de Damocles, es decir, la cárcel, pende aún más bajo sobre los periodistas de los medios kurdos que persiguen la verdad», ha declarado la asociación de periodistas. Se está librando una cruzada contra los periodistas de medios libres. «No permitiremos que se reprima a los medios libres y pedimos solidaridad con nuestros colegas».