Periodista sueco Joakim Medin fue condenado a 11 meses y 20 días de prisión en Turquía
El periodista sueco Joakim Medin recibió una sentencia diferida en el caso de insulto a Erdoğan, y permanece encarcelado en otro caso relacionado con terrorismo.
El periodista sueco Joakim Medin recibió una sentencia diferida en el caso de insulto a Erdoğan, y permanece encarcelado en otro caso relacionado con terrorismo.
Un tribunal de Ankara condenó el martes al periodista sueco Joakim Medin, representado por la Asociación de Estudios de Medios y Derecho (MLSA), a 11 meses y 20 días de prisión por el cargo de "insultar al presidente", pero suspendió la pena y ordenó su liberación. Sin embargo, Medin permanecerá en prisión debido a una investigación independiente en curso, en la que se le acusa de "propaganda terrorista" y "pertenencia a una organización terrorista".
La audiencia se celebró en el 79º Juzgado Penal de Primera Instancia de Ankara, y Medin compareció por videoconferencia desde la prisión de Mármara. Su defensa legal estuvo a cargo de los abogados Veysel Ok, Hazal Sümeli y Batıkan Erkoç.
Entre los observadores que se encontraban en la sala del tribunal se encontraban Jonas Sjöstedt del Parlamento Europeo, Ulrika Westerlund del Parlamento sueco, la embajadora de Suecia en Turquía, Malena Mard, así como representantes de Reporteros sin Fronteras (RSF), el sindicato de prensa turco DİSK Basın-İş, la Asociación de Periodistas de Turquía y la Asociación de Estudios de Medios y Derecho (MLSA).
Debido a una traducción deficiente durante el proceso de identificación inicial, el abogado Batıkan Erkoç intervino para interpretar desde la sala de videoconferencia. En su defensa, Medin afirmó que nunca recibió el escrito de acusación y que solo se enteró de los cargos tras ser encarcelado. Sus abogados confirmaron que la administración penitenciaria no entregó el escrito de acusación.
Énfasis en el periodismo
Medin explicó que el caso surgió a raíz de dos artículos que escribió para el público sueco sobre las reacciones del público al proceso de adhesión de Turquía a la OTAN. Afirmó que no asistió a la protesta mencionada en la acusación, que no eligió la foto utilizada en el artículo y que todas las decisiones editoriales las tomó su periódico.
Describió haber llegado a Estambul para un viaje de fin de semana y aseguró que no contó con traductor ni abogado durante su detención. Se comunicó con los agentes de policía mediante Google Translate y solo supo de qué se le acusaba después de su encarcelamiento.
“No tenía intención de insultar al presidente”, indicó Medin en su defensa y agreó: “Desde una perspectiva ética periodística, no es correcto menospreciar a nadie. El presidente Erdoğan es una figura política que lleva 20 años en el cargo, e informar sobre él es de interés público”.
Ok: "El caso plantea preocupaciones sobre los estándares judiciales y la reputación de Turquía"
El abogado Veysel Ok enfatizó que Medin actuó dentro de las normas periodísticas: "Las reglas del periodismo son claras tanto en Turquía como a nivel internacional. Un reportero escribe el artículo; el titular, el subtítulo y los elementos visuales los determina el equipo editorial. Medin simplemente estaba cumpliendo con su deber profesional".
Ok señaló que el artículo se publicó en sueco para lectores suecos y no tenía relación directa con la política interna turca: "Procesar esto en Turquía plantea serias preocupaciones tanto para los estándares judiciales como para la reputación internacional del país".
También señaló que la foto utilizada en el artículo de Medin se había publicado ampliamente en medios turcos de todo el espectro político, incluyendo la agencia progubernamental Anadolu y plataformas independientes como Diken yMedyascope. "Este contenido, que no está penalizado para los periodistas turcos, se utiliza para atacar a un periodista extranjero. Eso es una doble moral", indicó.
Ok hizo referencia a los comentarios hechos ese mismo día por el Ministro de Justicia de Turquía, quien afirmó que los periodistas que actúan dentro de los límites de su profesión no deben ser castigados. "Joakim no se extralimitó. Que permanezca en prisión, sin poder volver con su esposa embarazada, es inaceptable tanto por razones legales como humanitarias", denunció.
La abogada Hazal Sümeli argumentó que Medin había sido perseguido únicamente con base en información de inteligencia, lo cual no constituye prueba legal. Enfatizó que la protesta que motiva la acusación tuvo lugar en Suecia, bajo la legislación sueca, y que el principio de universalidad no aplica a este tipo de delito.
En su dictamen, el fiscal afirmó que Medin había cometido claramente el delito de "insulto al presidente" y solicitó tanto la condena como la continuación de su detención. El tribunal dictó una condena de 11 meses y 20 días, pero suspendió la pena y ordenó su liberación en ese caso.
Sin embargo, Medin permanece en prisión debido a una investigación independiente en la que enfrenta cargos más graves, como "hacer propaganda terrorista" y "pertenencia a una organización terrorista". Estos cargos se presentan al amparo de las amplias leyes antiterroristas de Turquía, que a menudo han suscitado críticas internacionales por su aplicación contra periodistas, académicos y disidentes políticos.
No se ha fijado fecha para la próxima audiencia de ese caso.