Cientos de mujeres enviaron una carta abierta al Sr. Masoud Barzani, Presidente del Partido Democrático del Kurdistán (KDP); a la Sra. Bese Hozat y el Sr. Cemil Bayik, Co-presidentes del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK); y al Sr. Lahur Talabani y el Sr. Bafel Talabani, Co-presidentes de la Unión Patriótica de Kurdistán (PUK).
La carta destacó que “Kurdistán no debería convertirse en un campo de batalla para guerras regionales o globales. Debería ser una inspiración para la democracia y la convivencia pacífica en el Medio Oriente"
La carta fue también enviada al Secretario General de la ONU, el Sr. António Guterres; a la Secretaria General del Consejo de Europa, la Sra. Marija Pejčinović Burić; a la Presidenta de la Comisión Europea. a la Sra. Ursula von der Leyen; al Secretario General de la OTAN, el Sr. Jens Stoltenberg; al Presidente de los Estados Unidos de América, el Sr. Donald Trump; al Presidente de la Federación Rusa, el Sr. Wladimir Putin, y al Presidente de la República de Irak, el Sr. Barham Salih.
El texto enviado denuncia que "A la sombra de una mortal pandemia mundial, en momentos en que gran parte de la humanidad está ocupada en protegerse del COVID-19, algunos estados aprovechan la oportunidad para continuar -e incluso intensificar- sus políticas militaristas, agresivas y de ocupación. A pesar de la actual crisis de salud en el mundo, las violentas luchas por la hegemonía, continúan en Kurdistán y el resto del Medio Oriente".
En la carta se indicó ademas lo siguiente:
"Durante el siglo pasado, la ubicación geoestratégica de Kurdistán, en cuatro estados ocupantes clave, la convirtió en un sistemático campo de batalla. Turquía, Irán, Irak y Siria han compartido una política de totalmente negacionista de la identidad kurda, incluso las organizaciones e instituciones internacionales se han negado a extender el reconocimiento legal, político y diplomático, del derecho de los kurdo a la autodeterminación. Como resultado de esto, los kurdos se han convertido, innumerables veces, en víctimas de crímenes de guerra y contra la humanidad. Paralelamente a este genocidio, los estados han implementado el femicidio como una forma especial de guerra contra las Mujeres Kurdas.
Los Estados que intentan implementar sus políticas coloniales, regionales y globales, siempre han utilizado, como su más brutal y sucia herramienta, la explotación de las diferencias entre aquellos que desean dominar: han explotado las disputas internas para dividir y gobernar. El estado turco, especialmente, insiste en tratar de debilitar a los kurdos, como lo ha hecho en el pasado, agitando conflictos internos kurdos en Rojava y en la región del Kurdistán iraquí, en una política de divide- gobierna-y elimina.
El Estado turco se está preparando para lanzar una gran ofensiva militar en la región de Zini Werte, cerca de las montañas Qandil en el sur de Kurdistán (al norte de Irak), región ubicada a 40-50 kilómetros de la frontera iraní. Como parte de su preparación, está presionando a las fuerzas políticas kurdas locales para que desplieguen fuerzas kurdas allí, como sus representantes. El estado turco cree que puede incitar a los kurdos a luchar contra los kurdos, con el objetivo adicional de debilitar y desestabilizar las instituciones políticas kurdas y, en última instancia, ocupar cada vez más el Kurdistán.
Turquía es miembro de la OTAN, las Naciones Unidas, y el Consejo de Europa. Es candidato a ser miembro de la Unión Europea. Sin embargo, está violando flagrantemente el derecho internacional y los acuerdos internacionales. El silencio de estas organizaciones/instituciones internacionales, permite al estado turco actuar unilateralmente contra los kurdos. De hecho, sus estados miembros están utilizando la actual hostilidad del estado turco hacia los kurdos para promover sus propios intereses en el Medio Oriente. Al debilitar la estrategia kurda actual por la democracia, la paz y la estabilidad, quieren impulsar sus intentos de ganar hegemonía en la región, incluso si eso significa continuar la guerra y el conflicto en la región.
La actual disputa en Zini Werte no es un problema aislado. Al contrario, es uno de los muchos conflictos que podrían fácilmente escalar, y provocar que se derrame sangre, especialmente si Estados Unidos, Irak y la OTAN le dan vía libre al ejército turco.
La carta indicó al respecto de la necesidad de la unidad kurda y de las responsabilidades de los líderes de la región:
"Creemos que la unidad entre sus partidos y movimientos, en defensa de Zini Werte y Qandil, no solo sería beneficioso para el pueblo kurdo, sino que también constituirá una contribución vital a la paz en la región. Además, creemos que abordar la cuestión kurda está indisolublemente vinculado a la promoción de una transformación democrática del Medio Oriente. Lograr una solución justa y pacífica a este problema podría ayudar a la democratización de la región en general. No debemos subestimar el potencial de la perspectiva kurda sobre la democracia y la convivencia pacífica en el Medio Oriente. Podría contribuir vitalmente a efectuar y preservar la democratización en los estados clave de Turquía, Irán, Irak y Siria.
En los últimos años, el norte y el este de Siria/Rojava han ofrecido una alternativa democrática, con libertad, justicia, dignidad, y basada en principios de igualdad. Los kurdos, y especialmente las mujeres kurdas, han luchado victoriosamente contra el ISIS, y han establecido un impresionante sistema de autoadministración democrática en el norte y el este de Siria/Rojava. El papel central desempeñado por las mujeres kurdas en esta lucha se ha convertido en una inspiración global y una fuente de fuerza para las mujeres, mucho más allá de las fronteras del Kurdistán. Defender y proteger la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria es, por lo tanto, imprescindible para la democratización de Siria y la región en general.
Desde su fundación, el Gobierno Regional de Kurdistán (KRG) de Irak, una entidad kurda internacionalmente reconocida gubernamental y constitucionalmente, ha sido una espina en la costilla del estado turco, que busca aplastar todas y cada una de las aspiraciones nacionales del pueblo kurdo. El estado turco considera cualquier desestabilización o debilitamiento del KRG como una victoria. El KRG, el área más segura de Irak, ha sido un importante logro para todos los kurdos, y debemos trabajar juntos para protegerlo a través de la unidad nacional kurda.
Finalmente reafirmaron que su responsabilidad "como mujeres, vemos como nuestro deber de prevenir la guerra y defender la paz y la convivencia, en cualquier parte del mundo".
Algunas de las firmantes de la carta abierta son: la Comisión de Mujeres del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK), Shirin Ebadi , Premio Nobel de la Paz, Ela Gandhi , Presidenta del Gandhi Development Trust y Phoenix Settlement Trust, Sudáfrica, Malin Björk , Miembra de la Unión Europea. Parlamento (MEP), El Partido Izquierda de Suiza, Silvia Modig , MEP, Vasemmistoliitto (Alianza de Izquierda), Finlandia, María Eugenia Rodríguez Palop , MEP, Podemos España, Leïla Chaibi , MEP, La France Insoumise (FI), Francia, Martina Michels , Die Linke, Alemania, Baronesa Helena Kennedy QC , Cámara de los Lores, Reino Unido, Baronesa Jenny Jones , Cámara de los Lores, Reino Unido, Margaret Owen , Directora Viudas por la paz a través de la democracia, Reino Unido, Julie Ward, la ex diputada del Parlamento Europeo 2014-20, Reino Unido, Maxine Peake , la actriz y escritora, Reino Unido, Janet Biel , la escritora política estadounidense, Debbie Bookchin , periodista, Estados Unidos, Barbara Spinelli , Italia, Bolonia, abogada, miembro de la junta ejecutiva de ELDH (Abogados Europeos para la Democracia y los Derechos Humanos), Lilian Galán, parlamentaria del Frente Amplio (Uruguay), Veronica Matto , parlamentaria del Frente Amplio (Frente Amplió) Uruguay.