De acuerdo con el informe, al menos la mitad de las mujeres que trabajan en instituciones públicas opinan que sufren discriminación laboral por razón de género.
KESK llevo a cabo 1.792 entrevistas con mujeres de 62 provincias y 84 grupos diferentes de trabajo. Las entrevistan tuvieron lugar entre el 25 de diciembre de 2019 y el 15 de febrero de 2020.
A medida que el nivel educativo aumenta, también lo hace el grado de conciencia sobre la discriminación.
Entre las mujeres divorciadas, la proporción de aquellas que piensas que están siendo discriminadas es mucho mayor que entre las mujeres casadas o solteras.
Lo mismo sucede con aquellas con menor seguridad laboral: sienten estar siendo discriminadas por ser mujeres.
En cuanto a la violencia, el 92 por ciento de las participantes declararon haber sido sujetos de un trato injusto (violencia) por lo menos una vez. El mayor problema es el “mobbing” y la prevención del uso de los derechos legales.
Un total del 59 por ciento de las mujeres afirmaron estar sujetas al mobbing en su espacio de trabajo, mientras que el 39 por ciento señalaron que no se las permitió hacer uso de sus derechos legales como el derecho a organizarse, otro 39 por ciento dijo haber sido discriminadas a la hora de mejorar su carrera o ser ascendidas. Y el 28 por ciento defendió haber sido acosadas verbalmente.
El 5 por ciento de las mujeres afirmaron haber sido agredidas fisicamente y el 3 por ciento sexualmente.
El 89 por ciento de las mujeres entrevistadas se quejaron sobre la falta de guarderías en sus lugares de trabajo. Y el 94 por ciento pidieron la apertura de estas.
En cuanto a la baja por maternidad remunerada, actualmente es de 16 semanas en Turquía: 8 semanas antes del nacimiento y 8 después. Sin embargo, el 51 por ciento de las mujeres entrevistadas dijo que la baja por maternidad remunerada debería concederse de 32 a 44 semanas, el 28 por ciento dijo que debería ser de 16 a 31 semanas, el 21 por ciento dijo que debería ser de 45 semanas o más.
Un tercio de las participantes asegura tener problemas con el permiso de lactancia.
El 86 por ciento de las participantes piensa que el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, debería ser declarado día festivo en Turquía.
En cuanto a la composición de las mujeres entrevistadas por KESK, el 82 por ciento eran empleadas públicas permanentes, el 9 por ciento eran empleadas contratadas, el 16 por ciento tenían un título de postgrado, el 69 por ciento tenían un título universitario.
El 61% de las mujeres estaban casadas, el 36% eran solteras y el 2% eran divorciadas.
El 94 por ciento tenía entre 25 y 55 años.
El 41 por ciento trabajaba en "servicios educativos", el 32 por ciento en "servicios sociales y de salud", el 17 por ciento hacía "trabajo de oficina" y el 7 por ciento trabajos técnicos, como arquitectura e ingeniería.
La mitad de las mujeres entrevistadas procedían de grandes ciudades, Estambul, Ankara, Izmir.