El Observatorio de Salud y Seguridad Laboral (ISIG), que publicó los datos sobre los accidentes laborales de mayo, anunció que al menos 177 trabajadores perdieron la vida el mes pasado. El número total de muertes laborales en los primeros cinco meses del año ha alcanzado las 796.

En mayo, el mayor número de fallecimientos se registró en los sectores de la construcción, la agricultura, el transporte y los servicios.

Las principales causas de estas muertes laborales fueron accidentes de tráfico, aplastamientos y derrumbes, infartos y caídas desde altura.

Entre los incidentes más destacados en mayo figuran dos trabajadores ganaderos que murieron por fiebre hemorrágica, un minero que perdió la vida debido a la silicosis y un trabajador textil que sufrió un infarto mortal durante una protesta por salarios no pagados.

Según ISIG, seis de los trabajadores fallecidos en mayo eran niños, mientras que siete eran refugiados. La mayoría de los menores trabajaban en los sectores agrícola, metalúrgico y textil. Los trabajadores refugiados se encontraban predominantemente en industrias pesadas como la agricultura, la construcción, el transporte y la minería.

ISIG subrayó que el 95 por ciento de los trabajadores que perdieron la vida no estaban sindicalizados, destacando que las muertes laborales no son cuestión del destino, sino consecuencia de condiciones de trabajo inseguras y sin organización.

Las cifras más altas de muertes laborales en mayo se registraron en Estambul, Aydın, Muğla y Sakarya.