La Comisión de la Mujer del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK) ha emitido una declaración con motivo del noveno aniversario del genocidio yazidí perpetrado por el ISIS en Shengal.

El 3 de agosto de 2014, los yazidíes de Shengal (Sinjar), en la región iraquí del Kurdistán, fueron atacados por el grupo terrorista ISIS, que actuaba como apoderado de Turquía. El ISIS practicó medidas especiales contra las mujeres para humillarlas y matarlas, por lo que también fue un caso de feminicidio.

En Shengal, el ISIS llevó a cabo tanto el genocidio como el feminicidio de forma sistemática. De las mujeres secuestradas aquel día, 3.000 siguen desaparecidas, según la organización de mujeres yazidíes TAJE. Decenas de miles siguen sufriendo el trauma que vivieron el 3 de agosto de 2014.

El comunicado de la comisión dice lo siguiente: "Unos doce Estados han reconocido el crimen contra los yazidíes como genocidio. Tal reconocimiento es un primer paso importante, y envía una señal política importante. Pero el reconocimiento del genocidio por sí solo no tiene consecuencias jurídicas. Y la ausencia de consecuencias jurídicas sólo anima a los perpetradores a seguir utilizando este peligroso instrumento.

Hoy, la Turquía de Erdogan quiere vengar la derrota de sus aliados del ISIS. Mediante ataques con drones y más ataques aéreos, Turquía intenta expulsar a los yazidíes de Shengal por completo. Por lo tanto, los drones y aviones turcos atacan instalaciones civiles, como hospitales y escuelas, además de las fuerzas de defensa yazidíes."

La declaración continúa: "El objetivo del régimen de Erdogan es llevar a cabo el terrorismo que el ISIS dejó inacabado y despoblar la tierra de los yazidíes, conocida como Yezidixan, para ocuparla y turquificarla, como provincia del antiguo Imperio Otomano. Esto es exactamente lo que el régimen turco hizo en Afrin en 2018 y en Serekaniye y Gire Sipî en 2019, en el Norte y el Este de Siria/Rojava.

Nuestra primera y más urgente demanda es que la ONU y el gobierno iraquí cierren inmediatamente el espacio aéreo a los drones y ataques aéreos turcos."

La Comisión de Mujeres del KNK también "exige la cancelación inmediata del acuerdo del 9 de octubre entre Irak, el KDP (Partido Democrático del Kurdistán) y Turquía a través de la mediación de la ONU. Este acuerdo prevé la despoblación de Yezidixan y se llevó a cabo sin la participación de los yazidíes.

Pedimos a la ONU que colabore con el gobierno iraquí y los representantes políticos yazidíes para lograr un marco político y jurídico que reconozca a Yezidixan como zona autónoma y lo consagre en la Constitución iraquí. Los yazidíes no son musulmanes, sino representantes de la antigua fe kurda, por lo que sufren una represión permanente en una región donde se libran guerras en nombre de la religión. Necesitan un estatuto de autonomía protegido tanto por Irak como por la comunidad internacional".

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