Huriye Uçar (38) vivía en Tempelhof, Berlín. Su vida terminó cuando se cayó del séptimo piso de un edificio. De acuerdo a los primeros indicios Uçar se suicidó.

Su cuerpo se mantuvo en el hospital a la espera de ser enviado a su ciudad natal, Birecik, al final de la investigación abierta por las autoridades.

DESTDAN Women's Assembly, BINEVŞ EDESA (Yazidi Women's Assembly), Jiyan Women's Assembly y Flamingo E.V han publicado una declaración conjunta por escrito diciendo: "Todos los asesinatos y suicidios de mujeres son políticos. La razón de estos asesinatos y suicidios es la guerra, la pobreza, todo tipo de opresión, la desesperanza, el sistema dominado por los hombres. El responsable de estas muertes es el estado  dominado por la mentalidad masculina".

La declaración añadía: "No somos la propiedad ni el honor de nadie. No puedes tocar nuestro cuerpo, nuestra alma, nuestras decisiones sobre nuestra vida. Como mujeres, continuaremos nuestra lucha contra todo tipo de violencia".

La declaración continuó: "Hoy nos han quitado a Huriye. Huriye terminó su vida porque la dejaron desesperada. Como instituciones de mujeres, no olvidaremos a nuestras hermanas. No nos quedaremos calladas ante los crímenes contra las mujeres."