En la apertura de la temporada del Teatro Scala, en Milán, los activistas protestaron por las masacres perpetradas por Turquía en el norte y este de Siria.

Junto con las protestas de los trabajadores y los sindicatos, los activistas protestaron por los ataques llevados a cabo por el estado turco en el norte y el este de Siria y, en particular, la masacre de niños en Til Rifat.

Los activistas organizaron un flash mob que mostraba imágenes de las masacres de Til Rifat. También se organizó una actuación sonora que reproducía un bombardeo mientras los activistas realizaban la muerte de civiles.