El invasor estado turco continúa con sus políticas malintencionadas contra el pueblo de la región. Han cortado el agua procedente del río Éufrates como parte de las políticas de perjudicar al pueblo en el acceso a un bien tan absolutamente esencial como el agua. Este corte ha provocado una drástica reducción de los niveles de agua de la presa de Tabqa. El agua ha bajado cuatro metros si nivel y ha provocado problemas de abastecimiento eléctrico también.
Los encargados de la presa han tenido que cerrar las compuertas así como realizar cortes eléctricos de 10 horas.
El ingeniero administrador de la presa, Mihemed Shexo, ha hablado con ANHA sobre esta cuestión y ha denunciado que los bajos niveles de agua afectan a las turbinas de la presa de forma negativa.
Según el acuerdo alcanzado entre Siria, Turquía e Irak, Turquía debe dejar el paso de 500m3 por minuto hacia Siria, pero la cantidad actual no llega a los 200m3. Esta cantidad reduce el agua de la presa e impide que el Éufrates pueda llegar a Irak.
Los responsables de la presa han tomado precauciones como reducir la cantidad de horas de electricidad suministrada para asegurar que la presa Tabqa no quede completamente inoperativa.
Mihemed Shexo ha dicho que el estado turco ha iniciado una guerra especial contra el pueblo de Siria con sus obscuras maniobras y solicitado que las organizaciones de derechos humanos y las instituciones internacionales tomen cartas en el asunto y presionan a Turquía para que cumplan con el acuerdo entre los tres países sobre el flujo del rió Éufrates.