Colectivo Luna se suma a las jornadas de acción mundiales por la "Libertad para Abdullah Öcalan"

"La solución política para el Kurdistán equivale a decir que es posible un mundo en el que el orden social no se base en la lógica de las fronteras, la discriminación racial, el patriarcado, la explotación de la naturaleza y de los trabajadores".

IMRALI

Activistas de LUnA (colectivo universitario de Làbas) participaron en la campaña internacional por la libertad de Abdullah Ocalan en Làbas Bolonia.

Al final del evento, un activista del colectivo leyó un comunicado de prensa sobre su acción, recibiendo un cálido apoyo de las y los jóvenes participantes en el evento.

El comunicado publicado por Colectivo LunA incluye lo siguiente:

"El 9 de octubre es una fecha dolorosa e importante para el Movimiento de Liberación del Kurdistán. Ese día, en 1998, el Estado sirio, a petición de Turquía, decidió revocar el estatuto de refugiado político y expulsar de su territorio al líder kurdo Abdullah Öcalan. Lo condenó al exilio, lo que condujo a su detención en Kenia el 15 de febrero de 1999 y su traslado a una prisión de máxima seguridad, donde todavía se encuentra encarcelado en un estado de aislamiento total contrario al derecho internacional y a la propia legislación turca. Con ocasión de los diez días de movilización por la ´Libertad para Öcalan, una solución política para el Kurdistán´, nosotros, activistas del LUnA (Laboratorio Universitario de Autogestión), hemos creído oportuno volver a llamar la atención del mundo universitario sobre la situación carcelaria de Öcalan y del pueblo kurdo. Además de ser un líder político, de hecho, Öcalan es también un importante teórico y su visión política, llamada ´confederalismo democrático´, prevé la superación del Estado-nación en favor de modelos de autoorganización democrática desde abajo, basados ​​en los pilares de la ecología, la libertad de las mujeres, la igualdad y la coexistencia pacífica entre los pueblos. Esta teoría es la base de la acción política que se expresa a diario dentro y fuera de nuestros espacios y, por ello, nuestra lucha en apoyo a Öcalan tiene una larga historia, y creemos firmemente que no puede quedar eclipsada.

El Kurdistán es un territorio dividido entre Turquía, Siria, Irak e Irán y al pueblo kurdo se le niega la posibilidad de autodeterminación y de expresión de su cultura e identidad en todos los diferentes estados, especialmente en Turquía. La visión de Öcalan, abandonando el objetivo de la independencia kurda en favor del confederalismo democrático de los pueblos, abrió un campo infinito de posibilidades para una solución política para el Kurdistán y su pueblo, un pueblo que ha estado esperando durante más de 100 años la posibilidad de expresar sus derechos étnicos y civiles sin tener que negar sus raíces culturales e identitarias, su lengua y sus tradiciones.

Una solución política para el Kurdistán equivale a decir que es posible un mundo en el que el orden social no se base en la lógica de las fronteras, la discriminación racial, el patriarcado, la explotación de la naturaleza y de los trabajadores y la represión de la disidencia. La libertad para Öcalan y una solución política para el Kurdistán significan luchar por un mundo en el que las comunidades decidan cuáles deben ser sus necesidades y cómo invertir sus recursos materiales, todo ello desde una perspectiva internacionalista que promueva la coexistencia pacífica de los pueblos y la demolición de los muros que dividen las luchas. Creemos que este es el futuro al que hay que aspirar y que la liberación de Öcalan es el primer paso fundamental que hay que dar para que este futuro pueda hacerse realidad”.