Durante la actividad, se leyó una declaración firmado por Mujeres Tejiendo el Futuro – Valle de Aburrá.
A continuación publicamos el comunicado completo:
24 de octubre de 2023
Partiendo de la causa misma de nuestra organización, que se basa en la solidaridad internacionalista con el pueblo kurdo y la confederación de los pueblos de Kurdistán, expresamos nuestro rechazo al proyecto de exterminio contra el hermano pueblo palestino, que ha sido perpetrado históricamente por el Estado de Israel, apoyado en la ideología sionista, y una forma de pensamiento guerrista y patriarcal. Rechazamos aún más firmemente la agudización de esta arremetida en las últimas semanas. Con dolor reconocemos la pérdida de más de cinco mil vidas y los llamados crímenes de guerra en que el pueblo palestino carece de todo: acceso al agua, a la energía eléctrica, al alimento, a lugares seguros y atención médica.
Ahora mismo avanza en diversas latitudes del Oriente Medio un genocidio sistemático y el despojo de los pueblos originarios que están en resistencia frente al dominio del capitalismo, de la herencia colonialista y patriarcal. La máquina de muerte se ha instalado. En Rojava el panorama no dista de los acontecimientos en Palestina. El pueblo kurdo ha demostrado de hecho que, la libertad de las mujeres, el Confederalismo Democrático y una sociedad regida por principios ecológicos supera los milenios de patriarcado, racismo, capitalismo y destrucción de la tierra y es un camino eficaz para dejar atrás los Estados-nación y toda la institucionalidad que despoja y desplaza a los pueblos para garantizar la concentración insaciable de poder y ganancias.
Somos mujeres del Valle de Aburrá que nos solidarizamos y pugnamos por la creación de nuevas formas de relacionamiento humano y la búsqueda de sistemas sociales alternativos. Por esta razón abrazamos la propuesta del Confederalismo Democrático una realidad en Rojava, y cuya bandera principal es la coexistencia pacífica de las diferentes identidades, soportada en los principios de libertad, igualdad y autodeterminación de los pueblos. Reconocemos que los Estados-nación son la mayor expresión del patriarcalismo y tienen como fundamento en su construcción la apuesta homogenizante de las identidades, la negación de un otro, o varios otros, las jerarquías y entre tantas formas de dominación que desembocan en conflictos como el israelí-palestino, que particularmente se ha basado en un colonialismo expansivo que niega el derecho de los habitantes ya enraizados en sus territorios a permanecer dignamente en ellos.
Este proyecto de Estado Israelí ha sido impulsado y patrocinado desde el colonialismo de Gran Bretaña, la financiación militar y discursiva de Estados Unidos y el silencio cómplice de la mayoría de los Estados del mundo. Condenamos esta gran conspiración de silencios, respaldada por organizaciones internacionales que, como la ONU, en nombre de la paz, dan un paso a un lado del genocidio al que todos estamos asistiendo, y se mantienen neutrales en tiempos de crisis.
Hacemos un llamado a la diplomacia entre pueblos, pero no la que hacen los presidentes, ya cargados de símbolos y acciones que niegan el dolor de la vida en la guerra, sino la que hacemos los pueblos vecinos de manera solidaria, amistosa y creativa para la búsqueda de soluciones reales a los problemas. Insistimos en que es posible una vida tejida desde la pluralidad, la autonomía, la democracia, en que las mujeres construimos críticamente un nuevo futuro y recuperamos el poder que en la historia nos fue arrebatado.
En esta coyuntura rechazamos el silencio y alzamos la voz por nuestras hermanas y hermanos palestinos.
¡Mujer, Vida, Libertad!
FUENTE: Kurdistán América Latina