Hoy se reanuda la segunda vista del juicio de Kobanê contra 108 políticos, entre ellos los ex co-presidentes del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Figen Yüksekdağ y Selahattin Demirtaş, en el Tribunal de la Prisión de Sincan.

En 2014, el HDP hizo un llamamiento para salir a la calle en apoyo de Kobanê, que estaba siendo atacada por el ISIS. Las protestas contaron con la oposición de las fuerzas de seguridad del Estado turco y de elementos simpatizantes del ISIS, y murieron un total de 43 personas, casi todas partidarias del HDP. Por esta convocatoria, los miembros del HDP están siendo ahora acusados de terrorismo, y también de asesinato por los que murieron. Son los mismos cargos formulados contra Selahattin Demirtaș que el TEDH ha considerado poco convincentes.

Antes de empezar la audiencia, la policía ha iniciado “un registro de bombas”. Con esto ha retenido durante largo rato a los allí presentes, entre ellos abogados y parlamentarios, que finalmente han podido entrar en la sala.

A los periodistas que querían seguir la vista no se les ha permitido entrar en la sala por carecer de tarjeta azul. Además, no se ha permitido la entrada de ordenadores y teléfonos en la sala, y familiares y acompañantes han sido enviados a otra sala aparte.

En el interior de la sala también hay fuerte presencia policial.

La delegación de la UE asistió a la audiencia

El co-presidente del Congreso Democrático de los Pueblos (HDK), Sedat Şenoğlu, el co-presidente del Partido Socialista de los Oprimidos (PES), Şahin Tümüklü, y diputados y dirigentes del HDP están asistiendo a la audiencia, así como expertos de la Delegación de la Unión Europea (UE) en Turquía.