El 14 de junio de 2018, durante la campaña electoral para las elecciones parlamentarias turcas en Suruç (Urfa), guardaespaldas y familiares del diputado del AKP Halil Yıldız llevaron a cabo un horrendo ataque en una tienda del mercado. Ferit Şenyaşar perdió a sus hermanos. Posteriormente, su padre fue golpeado hasta la muerte en el hospital por una turba formada por familiares del diputado.

Como forma de protesta, Ferit Şenyaşar y su madre Emine Şenyaşar llevan 28 días de sentada frente al tribunal de Urfa. Exigen que se condene a los asesinos. También piden justicia para Fadıl Senyaşar, hermano de Ferit, condenado a 37 años y nueve meses de prisión.

El hermano de Ferit Şenyaşar fue condenado por disparar supuestamente a uno de los atacantes, Mehmet Şah Yıldız, hermano del político del AKP Ibrahim Halil Yıldız, y por intentar disparar a otros cinco. Las grabaciones de vídeo contradicen claramente esta acusación. Las imágenes muestran que Şenyaşar está siendo golpeado por esas cinco personas, mientras que Yıldız es alcanzado por una bala que viene de otra dirección.

"Actuamos exclusivamente en defensa propia"

 "Si hubiera un juicio justo, mi hermano Fadıl sería liberado. Hay grabaciones de las cámaras de nuestra tienda. Las grabaciones dejan muy claro que los cinco hermanos nos defendemos", afirma Ferit Şenyaşar. Şenyaşar subrayó que la familia actuó en defensa propia y que la condena de su hermano es inaceptable. "Lo que ocurrió en nuestra tienda fue grabado por las cámaras de vigilancia. Las imágenes muestran cómo nos defendimos los cinco hermanos. Todo lo que hicimos fue en defensa propia. Pero el tribunal no lo aceptó, nos culpó y condenó a mi hermano a 37 años y nueve meses de prisión".

"Una familia aniquilada"

Şenyaşar continuó: "Los autores y los lugares donde tuvo lugar la masacre están claros, todo es claramente visible en las imágenes. Aun así, el tribunal culpa a nuestra familia. El tribunal condenó erróneamente a mi hermano Fadıl Senyaşar. No se dio cuenta del asesinato [de mi padre] en el Hospital Estatal de Suruç. Este asesinato tuvo lugar delante de todo el mundo. Una familia fue aniquilada. La fiscalía de Urfa sigue investigando este asesinato y ha emitido una orden de confidencialidad."

"Uno de los autores será liberado en unos meses"

De los atacantes, sólo Enver Yıldız fue condenado. Inicialmente a cadena perpetua, pero la sentencia se redujo luego a 18 años. El tribunal consideró una razón para reducir la condena el hecho de que los hechos se produjeron como resultado de una disputa creciente. En otras palabras, no fue un ataque planificado. Ferit Şenyaşar sostiene que "El juicio por el ataque a nuestra tienda se lleva a cabo en Malatya, mientras que el ataque en el hospital se realiza en Urfa. La familia Yıldız tomó todas las imágenes de vídeo. Participé en el juicio en Malatya y sentí que había presión política en el tribunal. Así que he llegado a la conclusión de que no se tomará una decisión justa".

Şenyaşar compara el veredicto contra su hermano Fadıl con la amplia impunidad de los atacantes y dijo: "Sólo el asesino de mi hermano, Enver Yildiz, fue condenado a 18 años. Sólo tiene que cumplir un tercio de esta condena. De hecho, saldrá de la cárcel dentro de unos meses. El asesino de mi familia se pasea por Suruç en los coches más caros, pero las fuerzas de seguridad se vuelven contra nosotros y nos atacan".

"Nunca aceptaremos este veredicto"

Şenyaşar insiste en que él y su madre nunca aceptarán este veredicto y que seguirán pidiendo justicia. Hace un llamamiento a la sociedad civil y a las organizaciones de derechos humanos, así como a las fuerzas democráticas, para que se solidaricen con su vigilia, que dura ya 28 días.