El coportavoz de la Comisión de Migrantes y Refugiados del HDP (Partido Democrático de los Pueblos), Gülsüm Ağaoğlu, dice en una declaración escrita con motivo del 1 de mayo: "No podemos olvidar a los trabajadores migrantes que se dejan morir de hambre. El brote de coronavirus en Turquía ha significado que, debido a las condiciones precarias e informales, más de un millón de trabajadores migrantes han sido abandonados a la inanición con sus familias".
Ağaoğlu añadió: "Algunos de los trabajadores migrantes ya se han convertido en las víctimas más evidentes del sistema de explotación al recibir salarios inferiores al salario mínimo. Además, ningún inmigrante ha podido recibir apoyo regular del subsidio de desempleo o de un fondo de ayuda similar después de su despido. Hacemos un llamamiento a todos los grupos progresistas para que planteen y acepten las demandas básicas de la clase obrera, que abarcan los derechos de los trabajadores migrantes más explotados".
Ağaoğlu continúa: "Sobre esta base, durante la pandemia, todos los trabajadores migrantes deberían tener cubiertas sus necesidades básicas como la electricidad, el agua y la calefacción. En la pandemia debe garantizarse el libre acceso a los materiales de higiene. Deberían ponerse en práctica lo antes posible planes estratégicos para apoyar a las familias inmigrantes, especialmente a las mujeres y los niños, también contra la violencia doméstica. Las expresiones de odio que profundizan la discriminación y el racismo deben ser combatidas eficazmente en un contexto jurídico".