El Congreso de Sociedades Democráticas del Kurdistán en Europa (KCDK-E) emitió un comunicado en el que decía que "los ataques fascistas, que comenzaron en Bélgica y se intensificaron en muchos centros de Europa, continúan aumentando".
La declaración continuó de la siguiente manera:
"Especialmente las declaraciones antikurdas del dictador Erdogan, la provocativa propaganda de Hakan Fidan en Europa, los grupos fascistas organizados a través de las redes de inteligencia, consulados y mezquitas del estado turco tienen como objetivo crear un ambiente de conflicto con la juventud kurda en las calles para frustrar la lucha por la libertad y ganancias.
El impacto mundial de la campaña internacional, la marcha masiva de cientos de miles de personas en Colonia el 17 de febrero y el Newroz de resistencia, que alcanzó a cientos de miles en casi todos los centros de Europa, perturbaron al Estado genocida turco.
Como siempre, se puso en marcha el plan para crear una atmósfera de conflicto en Europa poniendo a prueba la paciencia del pueblo y la juventud kurdos. Al igual que en Madımak, la policía y las autoridades belgas observaron los intentos de quemar la casa de una familia en Bélgica con la gente dentro.
Las reacciones masivas ante la justa reacción del pueblo kurdo y la protesta contra el método bárbaro tienen claramente como objetivo una escalada provocando a los grupos fascistas.
Para proteger los logros de nuestra creciente lucha que llevó a cientos de miles de personas a las calles, debemos actuar con la actitud de no caer en provocaciones en toda Europa y frustrar las ambiciones del estado fascista turco. Que nadie criminalice nuestra lucha justa y legítima. Llamamos a nuestro pueblo, a nuestras instituciones y a nuestras asambleas a adoptar una postura de no permitir ningún otro medio y método que no sea la reacción democrática ante los acontecimientos.
Ningún ataque fascista y racista podrá impedir la lucha justa y por la libertad del pueblo kurdo. Nuestra lucha justa y legítima vencerá".