La Copresidencia del Consejo Ejecutivo de la KCK emitió un comunicado escrito sobre el acuerdo de alto el fuego y la ocupación estatal turca en el noreste de Siria.
"El alto el fuego no debe dar lugar a la legitimación de la ocupación, sino a la retirada de las fuerzas de ocupación. En este sentido, no es posible que la resistencia de las SDF y el sector democrático acepten ninguna otra opción que no sea la retirada de los invasores.
La resistencia con un gran apoyo moral y legitimidad ha frustrado la conspiración del presidente estadounidense Trump y la conspiración fascista y antikurda de Erdogan contra los pueblos del noreste de Siria. La resistencia, la presión de los pueblos y del sector democrático han puesto al presidente estadounidense Trump en una situación difícil en la que ningún líder político se ha visto nunca en la historia, permitiendo la invasión del genocida fascista Erdogan.
Para salir de esta situación, la administración Trump ha tratado de impedir la guerra mediando un alto el fuego. Dada la resistencia de las SDF y el apoyo recibido, Trump ha experimentado tanta exposición y aislamiento como Erdoğan. EEUU y Turquía necesitaban un alto el fuego, para sobrevivir a las dificultades que encontraban a causa de la resistencia y su apoyo por parte de los pueblos del mundo y del sector democrático.
Con la aprobación de Trump, se entiende que la administración del noreste de Siria ha aceptado este alto el fuego para demostrar la injusticia de la invasión del fascismo Erdoğan. Dado que hubo un ataque de invasión y se han producido graves crímenes de lesa humanidad, este alto el fuego no debe traducirse en la legitimación de la ocupación, sino más bien en la retirada de las fuerzas de ocupación.
Los combatientes de las SDF y los pueblos del mundo y el sector democrático que apoyan esta resistencia tenían como objetivo poner fin a estos ataques de invasión y retirar a los invasores por completo. En este sentido, no es posible aceptar una opción que no sea la retirada de los invasores.
Después de las conversaciones entre las delegaciones estatales de EEUU y Turquía, la incomprensible demanda de retirar las fuerzas de las SDF significaría la legitimación de la ocupación. En este sentido, el acuerdo negociado por la delegación estadounidense, a excepción del alto el fuego, no tiene legitimidad política ni moral.
Los pueblos del noreste de Siria, los pueblos del mundo y el sector democrático no deben abandonar sus posturas de resistencia y tienen que continuar su lucha hasta que los invasores abandonen por completo el noreste de Siria. El alto el fuego sería significativo si se tomara como un proceso que llevara a la retirada de los invasores y a dar pasos en esta dirección.
Los crímenes de guerra cometidos por el Estado turco durante la operación de ocupación no pueden ser ignorados. Los aviones de guerra turcos utilizaron armas ilegales que usaron en las zonas de defensa. Los pueblos del mundo y las instituciones de derechos humanos deben rendir cuentas al líder de la guerra sucia, Erdoğan, y a los demás responsables del asesinato de civiles y del uso de armas ilegales"-