KNK: 3 años de tortura contra Abdullah Öcalan, 3 años de castigo colectivo contra los kurdos

"Hace tres años fue la última vez que recibimos señales de vida del líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan", declaró el KNK.

ÖCALAN

El Consejo Ejecutivo del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK) ha emitido hoy, 25 de marzo, una declaración en la que subraya que "hace tres años fue la última vez que recibimos alguna señal de vida del líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan".

En efecto, el 25 de marzo de 2021, Öcalan mantuvo una breve conversación telefónica de cinco minutos con su hermano, antes de que la línea fuera cortada repentinamente por las autoridades penitenciarias turcas sin ninguna explicación. El KNK afirmó que "desde entonces, el Sr. Öcalan ha estado recluido en régimen de incomunicación, una forma ilegal de confinamiento en solitario que tiene como objetivo hacerle "desaparecer" del mundo exterior y le prohíbe todo contacto humano. Esto incluye cualquier comunicación con su familia o sus abogados, lo que, una vez más, constituye una flagrante violación del derecho internacional. Desde que Abdullah Öcalan fue secuestrado el 15 de febrero de 1999, el Estado turco ha querido utilizar la isla de Imrali como ataúd flotante de facto".

La declaración añadía: "El líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan está secuestrado por el régimen turco en un estado de aislamiento extremo para castigarle por fundar el movimiento por la libertad kurda y dar al pueblo kurdo una filosofía sobre cómo liberarse. Turquía también prohíbe todo contacto con él para recordar a los kurdos que son una colonia interna ocupada. Millones de kurdos consideran al Sr. Öcalan el líder legítimo y Turquía cree que si consiguen silenciarlo, acallarán la voz de esos millones que lo consideran su representante.

Gracias al proyecto del Sr. Öcalan, el pueblo kurdo ya no es una víctima indefensa y no será presa de las políticas genocidas que han conformado la República Turca desde su creación en 1923. A medida que los kurdos se hacen más fuertes, Turquía se encuentra al borde del colapso, sumida en un estado de bancarrota económica, social y política. Irónicamente, el régimen de Ankara posee la solución a su propio problema. La única solución a la cuestión kurda y la reparación del Estado turco pasa por poner fin al aislamiento del Sr. Öcalan y restablecer el diálogo con él para lograr un acuerdo de paz duradero".

La declaración añadía: "En cuanto al mundo exterior, puede hacer lo que le corresponde haciendo que el régimen turco rinda cuentas de los tratados a los que está obligado. Las Naciones Unidas, el Consejo de Europa, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) siguen pasando por alto el trato ilegal que Erdoğan da al Sr. Öcalan. Como tal, él ve su silencio como complicidad y una luz verde para continuar sus crímenes en la isla de Imrali.

Como Congreso Nacional del Kurdistán, pedimos a estas organizaciones que apoyen los preceptos de la campaña internacional Libertad para Öcalan - Una solución política a la cuestión kurda y exijan que se permita al Sr. Öcalan reunirse inmediatamente con su familia y sus abogados. Esto contribuirá en gran medida a restablecer el camino hacia la paz".