Gherib Hasso, nuevo copresidente del Partido de la Unión Democrática (PYD), uno de los principales partidos políticos del norte y este de Siria, habla sobre las opciones de paz en Siria, las perspectivas de diálogo con HTS y la cuestión de las fuerzas extranjeras en el país. La entrevista se realizó en kurdo y ha sido acortada por razones de longitud y ligeramente editada para mayor claridad.
-¿Cómo ve los actuales acontecimientos en Siria? ¿Preveía lo que ha ocurrido y qué prevé ahora en un futuro próximo?
-La situación siria ha captado la atención de la comunidad internacional. El pueblo sirio ha soportado un sufrimiento considerable como consecuencia de esta guerra, que fue causada por una mentalidad opresiva; una mentalidad de Estado-nación adoptada por el régimen del (partido) Baaz. El régimen del Baaz gobernó durante 61 años, durante los cuales oprimió al pueblo sirio. Gobernaron el país con puño de hierro; dirigieron el país con opresión.
Cuando comenzó la revolución [siria], la comunidad internacional quiso dar pasos hacia una solución. Al principio, fue la Resolución 2254 la que pretendía resolver la revolución siria y encontrar una solución a la cuestión, resolviéndola con la participación de la oposición y el régimen. Se celebraron reuniones entre ambos bajo el patrocinio de la ONU. Sin embargo, estas conversaciones no tuvieron éxito. Las cumbres de Astana y Sochi tampoco aportaron ninguna solución. Hubo otros intentos en Moscú y El Cairo. Todos acabaron en fracaso. El régimen no tenía ningún proyecto para resolver el problema, su único proyecto era volver a antes de 2011. Esta era la base de su proyecto: volver a la era anterior a la revolución. La oposición tampoco tenía mucho cambio que ofrecer.
La situación en Siria es preocupante porque el régimen opresor se ha derrumbado, pero quienes lograron derrocarlo son personas con conocidas prácticas delictivas. Ahora el país está controlado por varias potencias. Están HTS, ISIS, facciones apoyadas por Turquía y las FDS (que tienen la región más estable). En una situación así, la ONU debe intervenir inmediatamente, así como la Liga Árabe. Pero hasta ahora no ha habido tales pasos; sólo muchas declaraciones. Pero si lo dejamos así, la situación no mejorará. La única potencia exterior que quiere interferir es Turquía, para dar forma a la solución del conflicto sirio en función de sus propios intereses. Esto es un error. La ONU, la Liga Árabe, Estados Unidos y Rusia tienen que interferir, bloquear a Turquía y reunir a todas las potencias dentro de Siria para dar forma a una solución. Debe celebrarse una reunión de emergencia y todas las potencias deben reunirse en ella. Las FDS, HTS y todos los poderes que dicen haber luchado contra Bashar al Asad deben unirse. Incluso la coalición de la oposición puede unirse. Si queremos resolver esta situación, esta es la manera de hacerlo. También debe formarse una nueva resolución.
Estamos aquí para expresar nuestro apoyo a la paz y a una solución satisfactoria para todas las partes implicadas. Es imperativo garantizar la protección de nuestro pueblo: llegar a un acuerdo, celebrar reuniones y lograr una resolución. Esto facilitará la resolución de la crisis regional de desplazados. Sin embargo, esto requiere la garantía de una entidad internacional. En primer lugar, debe establecerse un alto el fuego. Posteriormente, el pueblo podrá regresar a sus tierras, lo que permitirá a Siria emprender una nueva era y una nueva historia.
Considero que la solución para Siria pasa por el diálogo intrasirio. La solución es reconocer a todos los componentes de la sociedad y conceder a todos los pueblos que viven en Siria sus derechos y proteger sus valores. Marginar a las minorías, a las personas y a su cultura o religión no servirá de nada. Hay diferentes naciones, religiones y minorías que han protegido su existencia. Así que la solución siria está relacionada con el cumplimiento de todas estas condiciones para que podamos llevar a nuestro país a otro nivel.
-Las condiciones en las que se desarrollan las negociaciones sobre el futuro de Siria han cambiado por completo. ¿Ha cambiado su enfoque en este tiempo?
-Hubo muchas iniciativas para resolver esta crisis, pero fracasaron porque siempre excluían a los kurdos y a la región del noreste sirio (NES) de las reuniones. Esto constituye en sí mismo un crimen político y una marginación. La ONU adoptó una posición realmente débil, a pesar de haber nombrado varios comités, el último de los cuales está liderado por Pederson, que ahora no sabe qué hacer. La solución más realista para esta crisis es nuestro proyecto, el proyecto de la nación democrática. Es el único proyecto que respeta los valores del pueblo sirio.
El pueblo sirio se ha agotado a lo largo de la guerra, al igual que los mercenarios. Es posible que Turquía no acepte o no permita la puesta en marcha de este proyecto. Sin embargo, es evidente que la mayoría de la población desea una solución realista. Nuestra intención es facilitar una solución que traiga la paz a la región. Este es un objetivo que comparte la AADNES. Sin embargo, resulta difícil reunir a las distintas partes implicadas en el conflicto. Por consiguiente, es necesario que una entidad neutral e internacional facilite el diálogo y la reconciliación entre todas las partes. Así se evitará el ciclo de represalias y antagonismo que ha caracterizado la historia de la región.
-¿Están hablando con el Consejo Nacional Kurdo [ENKS]?
-No tenemos ningún problema con ellos. Como ya hemos dicho, nuestra posición es de apertura y disposición a colaborar con cualquier parte interesada. El ENKS es miembro de la coalición [SNC], que se formó para hacer frente al régimen. Sin embargo, el colapso del régimen ha hecho que el propósito de la coalición sea discutible. En consecuencia, no hay razón para que el ENKS permanezca en la coalición, ni utilidad alguna en hacerlo. Por ejemplo, si esta coalición ha llegado a un acuerdo sobre el estatus de nuestras regiones, no está claro cómo se aplicarán estos términos en nuestras regiones, dado que aquí no tienen ningún control. Para facilitar el entendimiento entre nosotros y las otras partes del acuerdo, y para unir el frente kurdo, estamos abiertos al diálogo. De hecho, no sólo estamos abiertos al diálogo, sino también a llegar a un acuerdo.
-Mantienen relaciones con otros partidos políticos dentro de Siria, fuera de la región del Norte y el Este de Siria. ¿Ve mucha aceptación o aprobación de sus perspectivas en estos momentos?
-Estábamos en contacto con algunos partidos dentro de Siria, en Damasco y Alepo, así como con particulares, políticos, intelectuales, además de con todos los partidos de la NES, con los que mantenemos sólidas relaciones. Celebrábamos reuniones y muchos se unían a nosotros. También tenemos relaciones con partidos e individuos sirios activos fuera de Siria, por ejemplo en Egipto y Europa. Hubo muchas reuniones para encontrar una solución a la crisis siria que fuera acorde con la Constitución democrática y el sistema descentralizado. Acordamos muchos términos. Sin embargo, la cuestión reside en hasta qué punto los dirigentes de HTS están abiertos a la democracia. Esto se pondrá de manifiesto cuando celebremos reuniones con ellos.
-HTS ha declarado que protegerá los derechos de las minorías y preservará la diversidad de Siria, rechazando la yihad global en favor de una agenda nacional. ¿Qué opina al respecto?
-Tienen que hacerlo. Tienen que hacer el cambio. No sirve de nada demostrar poder y amenazar. Tienen que cambiar. Hay alternativas. El proyecto democrático es sin duda la mejor alternativa. HTS controla ahora grandes territorios. Controlan Damasco. Tienen que suavizar su lenguaje. Si no lo hicieran, la comunidad internacional se volvería contra ellos. Ya están en la lista de organizaciones terroristas. No basta con hablar. Tienen que cambiar en la práctica y conceder sus derechos a todos los pueblos para que todos asuman su papel en este proceso político. Pero si solo hablan y en la práctica no ofrecen ningún cambio, entonces es peligroso. El pueblo sirio ya está harto de engaños, opresión y tácticas de guerra. Quieren acción real.
Cualquier solución debe ofrecer alivio a las personas que han sufrido años de guerra. El alivio vendrá de la confianza; de la paz y la estabilidad. La solución debe aliviar a todos los segmentos de la sociedad, y esto se basa en dar a la gente libre albedrío. Y aquí, el papel de las mujeres es realmente importante. Hay mujeres que se educaron y adquirieron conocimientos, capacidades y una mentalidad democrática. A lo largo de estos años de guerra, hubo muchas mujeres que se levantaron. Pueden tener un papel protagonista, si no se les impide hacerlo y se las encierra en sus casas.
-En la guerra civil siria han intervenido numerosos actores extranjeros. ¿Cómo se han visto afectadas sus posiciones por los acontecimientos desde el 27 de noviembre?
-Siria se ha convertido en un campo de batalla de actores globales que velan por sus intereses. Oriente Medio es una región muy amplia. Una fuerza que se convierta en hegemónica en Oriente Medio será también una fuerza hegemónica mundial. Estados Unidos ha estado en Oriente Medio durante un tiempo, pero Rusia no. Rusia e Irán entraron en la zona e Irán se hizo muy influyente. Turquía también quiere ganar influencia.
Si los problemas de Siria se resuelven encontrando soluciones internamente, esto no está de acuerdo con los intereses de Turquía. Turquía está perdiendo su papel en la región. Por eso Turquía amenaza constantemente a los pueblos de Siria. Nosotros no les amenazamos. Incluso encontrábamos puntos en común en Siria. Por ejemplo, en el tema de las fronteras de Siria, estábamos de acuerdo. Somos sirios y vivimos aquí, cerca de la frontera. Turquía habla de que desalojemos la zona a 30 kilómetros de su frontera. ¿Cómo es posible? Muchas veces hemos pedido que una fuerza internacional venga a la región para resolver este problema, como ocurrió con el sur del Líbano. El Estado turco no acepta una solución así porque significaría el reconocimiento de esta región. Quiero repetirlo: estamos abiertos a propuestas como esta. Los actores internacionales pueden garantizar la seguridad de la región fronteriza, de modo que puedan abordarse las preocupaciones de Turquía en materia de seguridad. Irán ha perdido, ya no tiene ningún interés en esta región, ni en Siria, ni en Líbano, ni en Palestina. La política de Irán y Rusia en la región ha terminado.
-Muchos piden que todas las fuerzas extranjeras abandonen Siria. Las Fuerzas Democráticas Sirias están asociadas con Estados Unidos. Las fuerzas estadounidenses están presentes sobre el terreno en el NES. ¿Cree que es necesario que las fuerzas extranjeras abandonen el país?
-Las fuerzas de la Coalición vinieron aquí de acuerdo con una resolución de la ONU, y no se trata sólo de Estados Unidos; aquí hay 81 Estados dentro de la Coalición para combatir a ISIS. Hasta que ISIS sea derrotado, seguirá existiendo una amenaza. Por ejemplo, en el campo de Al Hol y en otras prisiones hay detenidos de ISIS. También hay células durmientes de ISIS. La situación de la Coalición Global es completamente diferente a la de Turquía. ¿Quién dio permiso a Turquía para entrar en Siria? Irán entró con el permiso del régimen, porque eran aliados, al igual que Rusia. Pero ahora ya no existe el régimen del Baaz y se están marchando. Entonces, ¿qué hace Turquía aquí? Turquía es un Estado ocupante. La Coalición no es un Estado ocupante, ya que llegó en virtud de una resolución de la ONU. Cuando termine la ocupación, Siria tendrá la oportunidad de revivir. La Coalición se ha comprometido a estabilizar la región, pero ¿Turquía? Turquía estaba en contra del régimen. Ahora el régimen se ha ido, así que tienen que irse. No tienen nada que hacer aquí. En cuanto a la Coalición, tienen un tiempo limitado aquí, ya han mencionado que se irán en 2026. Pero Turquía no anuncia ningún plazo para su retirada.
FUENTE: Rojava Information Center / Traducción: Rojava Azadi Madrid