Las fuerzas turcas y los mercenarios aliados siguen atacando los campos de la población del norte de Siria en un intento de hacer pasar hambre a la población que quieren expulsar de la región como parte de su guerra genocida en curso desde octubre de 2019.

El ejército turco ocupante y las autoridades islamistas han iniciado el domingo incendios en los campos de los alrededores de la ciudad de Zirgan.  La agresión se dirigió a las tierras agrícolas de los pueblos de Aniq al-Hawa y Til Mihemed.  Los incendios siguen causando estragos en la región.

Las fuerzas de ocupación incendiaron los campos de las localidades de Til Temir (Tal Tamr) el sábado por la mañana con fuego de artillería.  Las zonas afectadas son Erîşa, Dawidiyê, Sîbatiyê, Ezîziyê, Reyhaniyê, Qasimiyê y Um El-Kêf.  Las llamas se extendieron a las tierras agrícolas de los pueblos de los alrededores.

El incendio provocado en las zonas del norte de Siria es parte de la estrategia de ocupación turca.  Se quiere que la gente de la región autónoma pase hambre, se desmoralice y sea expulsada.  En el distrito Sherawa, de Afrin, un hombre de 22 años fue herido mortalmente el viernes durante las operaciones de extinción de incendios.  Su muerte es uno de los innumerables crímenes de guerra cometidos por el Estado turco y sus tropas auxiliares yihadistas contra la población civil del norte y el este de Siria, que han sido aprobados de facto por la comunidad internacional.