El primer ministro libanés, Najib Mikati, advirtió el domingo de que los ataques aéreos israelíes podrían provocar la mayor oleada de desplazamientos de la historia de Líbano, con hasta un millón de personas obligadas a huir de sus hogares. La invasión iniciada durante la madrugada de ayer solo incrmentará el número de afectados. 

«Este podría ser el mayor desplazamiento que Líbano haya visto jamás», declaró Mikati en un discurso televisado, subrayando que la diplomacia sigue siendo la única solución viable para su país. 

Ziad Makary, ministro de Información libanés, confirmó durante una reunión del gabinete que la comunicación diplomática con Israel está en curso. «Es cierto que el gobierno libanés quiere un alto el fuego, y todo el mundo sabe que Netanyahu fue a Nueva York basándose en la premisa de un alto el fuego, pero se tomó la decisión de asesinar a Nasralá», dijo Makary.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, declaró ayer horas antes de la invasión que unas 200.000 personas ya han sido desplazadas dentro de Líbano, mientras que otras 50.000 han huido a la vecina Siria. El Programa Mundial de Alimentos ha puesto en marcha una operación alimentaria de emergencia, entregando ayuda a más de 66.000 personas. «Líbano está en un punto de ruptura y no puede soportar otra guerra», advirtió Corinne Fleischer, directora regional del PMA.

Por su parte, la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES), dirigida por los kurdos, también ha intervenido para ayudar a los que huyen del conflicto, estableciendo un grupo de trabajo de crisis para facilitar el reasentamiento seguro de los refugiados sirios que regresan del Líbano. Gulistan Elî, co-presidente adjunto de la Oficina de Relaciones Exteriores de la AANES, declaró que el grupo de trabajo supervisaría la recepción de los refugiados en la frontera y se aseguraría de que se reúnen de forma segura con sus familiares en la región. La AANES también planea proporcionar instalaciones especiales de alojamiento para quienes no tengan familia en la zona.

Elî hizo un llamamiento a las organizaciones internacionales y al gobierno sirio para que apoyen este esfuerzo, e instó a la reapertura del paso fronterizo de Al-Yaarubiyah (Til Koçer) para facilitar la ayuda humanitaria y el desplazamiento de los refugiados.

En respuesta a la crisis de los desplazados, el ejército libanés se ha movilizado para salvaguardar la unidad nacional y evitar disturbios civiles, mientras prosiguen los esfuerzos para proporcionar ayuda humanitaria esencial a los afectados.