En Sidney, Australia, las oraciones fueron leídas en el ritual matutino en la Iglesia Unida en solidaridad con Rojava contra los ataques invasores del estado turco.

Al evento asistieron el presidente del Partido Laborista, Anthony Albanese, el alcalde de Black Town, Susai Benjamin, el clérigo Bill Crews y alrededor de 200 australianos.

 "Los kurdos se pararon como un árbol en sus raíces"

La personas reunidas en la Iglesia dijeron: "El pueblo kurdo es como un árbol de la libertad. Este árbol siempre ha luchado contra los vientos, las tormentas, las inundaciones para mantenerse firme en su raíz y ha logrado mantenerse firme".

Albanese subrayó la lucha del pueblo kurdo contra los mercenarios del ISIS y dijo: "No debemos dejar a los kurdos solos; debemos asumir nuestra responsabilidad y expresar solidaridad a los kurdos".

Hablando en nombre de la DKTF, Lizz Norris dijo: "El silencio sobre la invasión del estado turco y los ataques de genocidio significa ser un socio en este crimen. Los estados y las instituciones internacionales deben actuar con urgencia para detener esto".