Una fuente de Afrin ocupada por Turquía dijo que los mercenarios de la policía militar secuestraron a cuatro miembros de una misma familia en la aldea de Jalem, en Jandirse. Entre ellos había una niña. Los mercenarios entregaron a los cuatro al cuartel general de la inteligencia turca en Afrin.
Según la fuente, tras varios días de investigación y tortura física y psicológica, la niña fue liberada y ahora se encuentra en mal estado de salud.
La fuente añadió que la inteligencia turca trasladó a uno de los secuestrados al hospital de los mercenarios militares en la ciudad de Afrin. Ha sido sometido a diversas formas de tortura y violaciones y se encuentra en mal estado de salud. La suerte de los demás miembros de la familia sigue siendo desconocida.