Miles de personas celebraron ayer en Barcelona el 10º aniversario de la liberación de Kobanê del ISIS y expresaron su apoyo a la resistencia en la presa de Tishrin.
Amigos y amigas del pueblo kurdo, políticos y políticas, sindicalistas, académicos y académicas y organizaciones juveniles participaron en la manifestación organizada por Defend Kurdistan.
Durante la misma, que partió de la Rambla del Raval, los y las activistas pronunciaron discursos de condena de los ataques del Estado turco y los mercenarios aliados de Turquía contra Rojava.
“Defender Rojava es defender la igualdad, la libertad y la ecología”, dijeron los oradores, señalando que la resistencia liderada por las YPG y las YPJ en Tishrin es una fuente de inspiración para todos los pueblos.
La marcha terminó frente al Consulado turco, donde los manifestantes condenaron al Estado turco y al régimen de Erdoğan. Los manifestantes denunciaron el silencio de los Estados europeos ante los crímenes contra la humanidad cometidos en Rojava y expresaron su solidaridad con la resistencia que se está llevando a cabo allí. Además, los activistas distribuyeron octavillas informativas frente al Consulado.
Los oradores también señalaron que la libertad de Kobanê se consiguió a un gran coste y es un símbolo de esperanza para toda la humanidad: “La lucha librada en Kobanê continuará para que los pueblos de Oriente Próximo alcancen un futuro mejor”. Y subrayaron que la Revolución de Rojava será protegida y mejorada con la solidaridad de todos los pueblos del mundo.
Noticias relacionadas: