Las Naciones Unidas marcaron hoy el Día Mundial de la Ayuda Humanitaria recordando a los 125 trabajadores humanitarios que fueron asesinados en 2019 y a los cientos de personas que resultaron heridas o secuestradas.

"La ONU condena estos ataques y pide responsabilidad para los perpetradores y justicia para los sobrevivientes. Los trabajadores humanitarios no pueden ser un objetivo", indicó OCHA, la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.

Según la Base de datos de seguridad de los trabajadores humanitarios compilada por el grupo de investigación Resultados Humanitarios, los grandes ataques contra los trabajadores humanitarios el año pasado superaron a las cifras de todos los años anteriores desde, que comenzaron los registros en 1997.

En 277 incidentes separados en todo el mundo, un total de 483 trabajadores de ayuda humanitaria fueron atacados, de los cuales 125 fueron asesinados, 234 heridos y 124 secuestrados.

La cifra representa un aumento del 18% en el número de víctimas en comparación con 2018.

La mayoría de los ataques se produjeron en Siria, seguidos de Sudán del Sur, la República Democrática del Congo, Afganistán y la República Centroafricana.

La ONU dijo que los trabajadores humanitarios y los socorristas de la salud ahora estaban haciendo todo lo posible para ayudar a las personas cuyas vidas se han visto trastornadas por las crisis, y ahora por la pandemia mundial de COVID-19. "Este año, los trabajadores humanitarios crecieron como nunca antes", dijo el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y agregó:

"Están respondiendo a la crisis global de COVID-19, y con ella el aumento masivo de las necesidades humanitarias debido a las consecuencias de la pandemia.

Son los héroes anónimos de la respuesta a la pandemia, y con demasiada frecuencia arriesgan sus propias vidas para salvar las vidas de otros".

"Sólo en las últimas semanas, ataques despreciables han matado a trabajadores humanitarios en Níger y Camerún, y desde el inicio de la pandemia, decenas de trabajadores de la salud han sido atacados en todo el mundo", expreso por su parte OCHA.

El 9 de agosto, seis trabajadores humanitarios franceses murieron en un refugio de vida silvestre en Níger.

Y el martes, la Cruz Roja indicó que se habían reportado más de 600 ataques a trabajadores de la salud en relación con la crisis del COVID-19.

El Día Mundial de la Ayuda Humanitaria se celebra en el aniversario del ataque del 19 de agosto de 2003 al recinto de la ONU en Bagdad, que mató a 22 personas.

Mark Lowcock, coordinador de ayuda de emergencia de la ONU, dijo: "La mejor manera de rendir homenaje a los trabajadores humanitarios es financiando su trabajo y garantizando su seguridad".