El diputado del Sinn Féin, Chris Hazzard, dijo al respecto: "La negativa del gobierno británico a firmar los compromisos en materia de derechos humanos como parte de su acuerdo de Brexit con la UE podría tener enormes implicaciones para los derechos de las personas en el norte".

"Michael Gove admitió que no firmar los compromisos permitiría al gobierno británico modificar la legislación sobre derechos humanos. Esto podría allanar el camino para que el gobierno británico deseche la Ley de Derechos Humanos o abandone la Convención Europea de Derechos Humanos. Esta acción va en contra de las protecciones contenidas en el Acuerdo del Viernes Santo, y plantearía serias preocupaciones sobre los derechos de las personas en el norte", añadió Hazzard-

"El gobierno irlandés tiene la responsabilidad de asegurar que los ciudadanos irlandeses del norte, que seguirán siendo ciudadanos de la UE después del Brexit, puedan seguir accediendo y disfrutando de los derechos de la UE. El Taoiseach [Primer Ministro irlandés] ha prometido públicamente que los ciudadanos irlandeses del norte no se quedarán atrás otra vez y si es serio al respecto, debe trabajar para salvaguardar nuestros derechos", continuó.

Es necesario, dijo el diputado del Sinn Féin, "que la UE y el gobierno irlandés se aseguren de que lo que ya se ha acordado entre la UE y el gobierno británico en el Protocolo Irlandés del Acuerdo de Retirada se aplique en su totalidad".